El monopolio cervecero y la falta de competencia en el mercado cervecero seguirán existiendo en México, a pesar de que la Comisión Federal Competencia (CFC) ordenó a Grupo Modelo y Cuauhtémoc Moctezuma modificar sus contratos de exclusividad de venta al menudeo, advierten competidores.
“Dado que algunos minoristas son muy grandes y muchos otros muy pequeños, las exclusividades causarán una restricción a las ventas de cerveza a un grado mucho más extenso que el reflejado en los compromisos. Por lo tanto, la situación existente de falta de competencia podrá seguir existiendo”, afirma Miller Trading Company, subsidiaria de SAB Miller en México.
“Este acuerdo demuestra que ambas cerveceras reconocen que sus exclusividades constituyen prácticas anticompetitivas con un efecto negativo tanto en consumidores como en competidores”, afirmó Armando Valenzuela director general de Miller Trading Company.
“Desafortunadamente, la CFC consideró apropiado seguir permitiendo la existencia de exclusividades y, sorprendentemente, permitió se mantenga la discriminación contra las marcas de Miller”, manifestó el ejecutivo.
El directivo de la firma estadounidense aseguró que una apertura completa del mercado en México hubiera sido mejor para los consumidores, minoristas, importadores, cerveceros artesanales e inversionistas.
EL ANUNCIO
24 HORAS informó el pasado viernes que por una determinación de la CFC las cervezas artesanales gozarán de acceso abierto e irrestricto a los restaurantes, bares y cantinas, los contratos de exclusividad deberán ser escritos, transparentes y de duración limitada, así como los contratos de exclusividad no podrán rebasar 25% del total de los establecimientos a los que les venden las empresas.
“Con estas condiciones, derivadas de compromisos ofrecidos por Cervecería Modelo y Cervecería Cuauhtémoc, concluye la investigación por prácticas monopólicas relativas en este mercado”, informó el organismo dirigido por Eduardo Pérez Motta.
Modelo y Cuauhtémoc aceptaron las condiciones establecidas por los comisionados de la CFC, las cuales entrarán en vigor en 90 días.
¿ARTESANAL?
“A los cerveceros artesanales nos abren los bares, restaurantes y cantinas, pero nos dejan fuera de otros puntos como hoteles”, manifestó Jesús Briseño, presidente de la Asociación Cervecera de la República Mexicana (Acermex).
Agregó que es una apertura con limitaciones y condicionantes que no elimina los contratos de exclusividad y omite el espíritu de apertura a la competencia que debemos fomentar en México.
“Esos mismos canales no los abren a los importadores, algunos de nuestros miembros son importadores, así que al mantener canales cerrados se afectan negativamente las alternativas del consumidor mexicano”, señaló el también director general de Cervecería Minerva.
“Será importante seguir avanzando para que haya una apertura total del mercado y todos compitamos en base a precios y calidad de los productos”, dijo Jaime Andreu Galván director comercial de Cervecería Primus y vocero de Acermex.
“También estaremos muy atentos a ver muy bien cuáles son las exclusividades que mantienen las dos grandes cerveceras para que se traduzca en pasos reales y no en una ilusión”, dijo Andreu Galván.
El ejecutivo de Cervecería Primus dijo que es necesario trabajar por el reconocimiento y la distinción del término cerveza artesanal, ya que hoy no existe en el país un reconocimiento en ese sentido.
“Esto se presta a un juego que engaña al consumidor al mantener la posibilidad de ofrecer cerveza de gran escala de producción como si fuera artesanal cuando los procesos, el cuidado, los ingredientes y el producto final, son en realidad muy diferentes”.
LA DENUNCIA
En 2010, Sab Miller y un grupo de cerveceras artesanales interpusieron una denuncia en contra de los dos gigantes cerveceros por presuntas prácticas monopólicas.
“Miller se encuentra analizando la resolución para determinar su respuesta en su debido tiempo”, dijo Armando Valenzuela.
Los compromisos hechos por las dos cerveceras dominantes están limitados por varias excepciones significativas, las cuales les permiten aún restringir las ventas de sus competidores a la mayoría de sus clientes minoristas en importantes regiones del país, aseguró el director general de la cervecera.
“La CFC y las dos cerveceras dominantes no llegaron al fondo del asunto para materialmente cambiar las condiciones de acceso al mercado de la cerveza y para una competencia real”, dijo Valenzuela.
“En una inesperada y adicional concesión en la resolución, la Comisión ha permitido que los micro-cerveceros artesanales tengan acceso irrestricto a los canales de venta en envase abierto, pero ha aceptado que las cerveceras dominantes puedan seguir bloqueando la entrada de Miller y otros importadores a estos canales”, lamentó.