El atletismo, considerado como el principal deporte olímpico, se encuentra en una de sus peores crisis, debido a los múltiples escándalos de dopaje que se han revelado en fechas recientes, específicamente con atletas de Estados Unidos y Jamaica, dos de los países que dominan la escena en la pista.

 

La mira está puesta sobre los deportistas jamaiquinos, ayer martes la policía italiana indicó que los velocistas Asafa Powell, Sherone Simpson y su preparador físico, el canadiense Christopher Xuereb, son investigados por supuestamente violar las leyes antidopaje de ese país.

 

Desde hace años estos atletas entrenan en la ciudad de Lignano Sabbiadoro, al noreste de Italia, donde hace algunos días arrojaron positivo en un control antidopaje, por lo que la policía allanó sus habitaciones de hotel y confiscó sustancias desconocidas, que están en análisis.

 

Ambos atletas dieron positivo a la sustancia estimulante oxilofrina, similar a la efedrina, durante las pruebas oficiales de la selección de Jamaica, por lo cual Powell adelantó que no participará en los Campeonatos mundiales de atletismo de Moscú.

 

Según información no confirmada, habría otros tres atletas, que también dieron positivo. A estos casos hay que agregar el de la también jamaiquina Veronica Campbell-Brown, dos veces campeona olímpica de 200 metros, quien se encuentra suspendida provisionalmente tras dar positivo por un diurético prohibido.

 

En caso de confirmarse todos los casos, serían 17 atletas jamaiquinos los que han dado positivo por sustancias prohibidas desde el 2008, situación que deja en muy mal estado el prestigio de un país hegemónico en las pruebas de velocidad.