Operadores que trabajaban en SIF ICAP, la subsidiaria de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) que hace operaciones interbancarias de bonos y derivados, renunciaron en grupo e inmediatamente el lunes pasado.

         Personas que conocen de cerca la situación recordaron que esto pudo ser una especie de venganza en contra de Luis Téllez, el presidente y director general del mercado de valores mexicano.

 

El hombre que contrató a los operadores que renunciaron a la BMV el lunes, es Rodolfo Sánchez Arriola, un consultor que trabaja para GFI, una de las grandes administradoras de fortunas en el planeta, con sede en Nueva York.

 

Sánchez Arriola era el director de SIF ICAP hasta febrero de 2012. Se informó oficialmente que había renunciado y que se dedicaría a proyectos personales.

 

Sin embargo, presentó una demanda por despido injustificado contra la BMV, en el Juzgado 46 Civil del Distrito Federal, en noviembre del año pasado.

 

Fuentes de GFI explicaron a 24 HORAS que les sorprendería que esto fuera una especie de venganza contra Téllez y la BMV.

 

Recordaron que desde el año pasado era pública su intención de contratar a expertos locales, lo que les ayudaría a potenciar la presencia de su oficina de reciente creación en esta capital.

 

Ni Luis Téllez ni Gabriel Rodríguez, el director actual del SIF ICAP, respondieron a las peticiones de información de este diario.

 

Los voceros de la BMV reiteraron que lo único que dirían está en un comunicado que emitieron el martes por la tarde.

 

“El día 15 de julio de 2013, 12 empleados operadores de esta compañía, que representan cerca del 25% del personal, decidieron renunciar voluntariamente a la relación laboral que mantenían con SIF ICAP, con carácter inmediato e irrevocable, debido a que recibieron una invitación para trabajar en otra empresa de giro similar, que aún no inicia operaciones en el mercado”, explica la Bolsa Mexicana.

 

“No se prevé que debido a esas renuncias el negocio de SIF ICAP, ni los resultados de la BMV, se vean impactados de forma material. La BMV e ICAP Norteamérica, accionista de SIF ICAP, están tomando todas las medidas necesarias para garantizar que las operaciones en su subsidiaria se sigan llevando a cabo”, asegura.

 

GFI tampoco quiso abundar en el caso. Fuentes de la empresa dijeron que eso no es de su incumbencia, ellos vienen a abrir una oficina y no saben qué problemas hay más allá de la demanda laboral de su consultor contra la BMV.

 

Aunque confirmaron que están en periodo de contratación y que abrirán su oficina en México muy pronto.