Si las figuras de Cuauhtémoc Cárdenas o Andrés Manuel López Obrador opacaron en algún momento al PRD, ahora son tres corrientes nacionales: Nueva Izquierda, Izquierda Democrática Nacional y ADN, quienes están por encima del partido y  controlan el acceso a las candidaturas, explica el ex gobernador de Michoacán, Leonel Godoy.

 

“Gentes que no estamos en corrientes nacionales no tenemos posibilidades de candidaturas y antes no era así”, explica el cofundador del PRD.

 

“Antes, las corrientes decían que el PRD debería estar por encima de las personalidades, y se quejaban de que Cuauhtémoc Cárdenas era la influencia mayor en el PRD. Decían que eso no debería ocurrir y tenían razón. Entonces, las corrientes primero se rebelaron que porque Cuauhtémoc era una especie de caudillo en el partido y luego contra Andrés Manuel. Pero ahora las corrientes están por encima del partido también”, se lamenta el senador por Michoacán.

 

¿Los resultados de las elecciones de este mes son fruto de las tensiones internas?

 

Siempre, por lo menos desde 1996, el siguiente año después de las elecciones presidenciales es un mal año para nosotros. Porque hay estados donde tienes fuerza y hay estados donde no tienes fuerza. Siempre, el mejor año del PRD es el quinto año, porque son las elecciones donde el partido tiene más fuerza.

 

Aun así se han perdido votos en los estados donde hubo elecciones.

 

El PRD en este momento está en un proceso de discusión interna muy intensa. Va a haber un congreso nacional a finales de septiembre donde se va a resolver la línea política de cara a las elecciones de 2018. Se va a plantear qué tipo de partido debemos tener. Todos los partidos, entre ellos el nuestro, tienen una crisis de identidad, ideológica y política. Y también atravesamos por prácticas viciadas de las corrientes.

 

¿Cómo va a modificar el PRD esta inercia?

 

Debemos primero definir el programa del partido con la posición ideológica y la línea política. Algunos dicen que nos corramos hacia al centro, otros dicen que seamos un partido de oposición total… Hay una discusión. Yo sí creo que el PRD necesita cambios profundos en su programa, en sus órganos de dirección y en sus prácticas políticas. En este momento la hegemonía en el partido son las corrientes. Yo fui candidato a diputado federal dos veces sin pertenecer a una corriente nacional, también a senador y gobernador. Ahora no podría.

 

¿Cómo obtuvieron tanto poder las corrientes en el PRD?

 

En todos los partidos hay corrientes, pero el PRI y el PAN no lo establecen en sus estatutos porque son partidos viejos. El PRD es un partido nuevo y lo estableció en sus estatutos. En aquellos años, mucha gente nos decía que eso era un grave error. Es posible que hayan tenido razón pero el PRD así se fundó. Fuimos diferentes expresiones de la izquierda, de liberales y del nacionalismo revolucionario priista que llegamos a conformar el PRD. A mí me parece que fue acertado. Que no se pudo controlar, eso es cierto. Y ahora quien controla el partido son las corrientes: están en los órganos de dirección, están los órganos de elección, están en los órganos de justicia partidista. O sea, tienen cooptados todos los espacios. No hay un solo espacio en el partido que sea imparcial.

 

¿Qué corrientes son las que tienen más fuerza actualmente en el PRD?

 

Yo diría que hay tres corrientes grandes: Nueva Izquierda, que es la mayoritaria, de los Chuchos; Izquierda Democrática Nacional, de Bejarano, y ADN, de Héctor Bautista. De estas tres, la que se ha manifestado para el centro es Nueva Izquierda. Los otros mantienen una posición de izquierda. Estoy hablando ideológicamente, no de las prácticas.

 

¿Hay posibilidad de acuerdo en el congreso de septiembre?

 

Van a surgir nuevos actores, como Marcelo Ebrard. Él no tiene una posición parecida a Nueva Izquierda ni a Izquierda Democrática Nacional, es una posición diferente. Y hay un grupo, los viejos comunistas, que van a impulsar a Carlos Sotelo. Yo espero que haya acuerdo, yo soy de los que voy a impulsar el acuerdo.

 

¿Y si no lo hay?

 

No es la primera vez que tenemos una gran discusión de la línea política y de la posición ideológica del partido. En 1994 o 95, tuvimos que definir una posición al respecto, porque como veníamos del fraude del 88, la posición del partido había sido de ninguna relación con el gobierno.

 

¿Y cómo ve la estrategia que sigue ahora el PRD a nivel nacional?

 

En este momento quien dirige al partido tiene una posición más cercana a la socialdemocracia que si estuviera otro grupo del partido que es más cercano a la izquierda comunista, por decirte algo.

 

Yo creo que nosotros deberíamos ser un partido de oposición, claramente de oposición. No sólo en los temas electorales sino en los grandes temas nacionales. En todos los campos debemos tener una posición diferente, porque yo no tengo ninguna duda que el PRI es un partido de derecha.

 

Entonces no está de acuerdo en que el PRD esté en el Pacto por México.

 

Yo apoyo a mi partido aunque no esté de acuerdo en lo personal con algunas cosas. Yo, por ejemplo, creo que el asunto del Pacto por México debió haber sido procesado de otra manera, independientemente de estar o no en él. Pero eso ya es historia pasada. Ya está el partido ahí y lo que veo es que las posiciones se van a ir decantando. Tenemos una posición muy diferente en las reformas energética y fiscal. Y en estas hay unanimidad en el PRD en estos temas. Es una posición contraria a los otros integrantes del pacto. ¿Cómo le van a hacer nuestros dirigentes? No sé.

 

Antes de ser un partido de corrientes, ¿el PRD era un partido de caudillos?

 

No, no, no. Eso lo decían algunos, yo nunca he estado de acuerdo con eso. Obviamente Cuauhtémoc Cárdenas funda el PRD, gana las elecciones del 88, hay un gran movimiento nacional, y adquiere un liderazgo. Yo digo que era un líder fuerte, que es diferente a un caudillo. Igual Andrés Manuel, gana las elecciones en 2006, hace un movimiento nacional y adquiere un liderazgo muy fuerte. Pero, a diferencia de la época de Cuauhtémoc Cárdenas que es cuando se funda el PRD, las corrientes en aquellos años no tenían la fuerza que tenían en 2006. Entonces las corrientes, en 2006, y más las que no estuvieron de acuerdo con los métodos de Andrés Manuel, se le enfrentaron. Por eso Andrés Manuel terminó saliéndose del PRD. Se cansó de batallar con las corrientes. Yo creo que le faltó paciencia.

 

¿Qué supuso para el PRD la salida de Andrés Manuel?

 

Yo creo que como era inevitable, simplemente se aceptó. Yo soy de los que opiné y sigo opinando que debió haberse hecho el mayor esfuerzo para que Andrés Manuel no se fuera. Así como el 88 fue el año del gran acontecimiento de unidad de la izquierda el 2012, es desafortunado para la unidad de la izquierda, la salida de Andrés Manuel.

 

¿Pero hizo daño al partido?

 

En término de militantes, no, y mucho menos de dirigentes y de personalidades. Yo creo que ha sido mínimo. Yo tengo una opinión diferente de muchos compañeros. Yo creo que donde se va a reflejar es en 2015, a la hora de votar, es donde creo que puede reflejarse. Si no ponemos en práctica la política de alianzas… Yo estoy luchando para que en Michoacán toda la izquierda, obviamente incluido Morena, tenga un mismo candidato a gobernador.

 

¿Morena sí aceptaría?

 

No sé, pero la mayoría eran perredistas.