La emboscada contra miembros de la Policía Federal (PF), registrada hoy en la carretera Lázaro Cárdenas-Colimam dejó cuatro uniformados muertos y cinco más lesionados, confirmaron autoridades de la Procuraduría General de Justicia de Michoacán.
Al respecto, se dio a conocer que durante los hechos, que ocurrieron a la altura de la comunidad de Pichilinguillo, nueve uniformados resultaron lesionados.
Sin embargo, al ser trasladados vía aérea al puerto de Lázaro Cárdenas para su atención médica, cuatro uniformados perdieron la vida como consecuencia de las lesiones causados por los impactos de balas.
Los restantes cinco policías fueron estabilizados e internados en diferentes hospitales, donde continúan siendo atendidos.
Con esto, el número de bajas de la Policía Federal durante los últimos días en la entidad se eleva a seis, mientras que el de lesionados llegó a 20.
Antes en conferencia de prensa el gobernador interino de Michoacán, Jesús Reyna declaró que se tenía información, no confirmada, “de que pudiera haber dos elementos de la Policía Federal que perdieron la vida y cinco policías que estén lesionados” tras el ataque de hoy en la región de Pichilinguillo, en la zona costera de Tierra Caliente.
A decir del mandatario los hechos violentos que se han registrado en la entidad no representan malas noticias para Michoacán, por el contrario, son muestra de que se combate a la delincuencia.
“Estas noticias que muchas veces decimos que son malas, para nosotros sin decir que son agradables, decimos que son noticias que nos dicen que se está actuando con eficiencia en el ataque a la delincuencia y que se está combatiendo la delincuencia para seguridad de los michoacanos”, dijo.
Reyna García negó que la serie de ataques y bloqueos carreteros registrados durante las últimas horas sean resultado de la detención o abatimiento de algún capo criminal y más bien, reiteró, que son la reacción de la delincuencia ante la fuerte presencia y contundencia de las fuerzas federales.
El gobernador confirmó la emboscada sufrida por la Policía Federal este miércoles en las inmediaciones de la comunidad de Pichilinguillo, así como el desarme de la policía municipal a manos de encapuchados en el municipio de Aquila.
Sin embargo, afirmó que en este último caso el conflicto más que de delincuencia es social-laboral, pues está ligado con la operación de una mina. (Con información de Notimex)
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