Darren Aronofsky verá cumplido su sueño de llevar a la pantalla grande la historia de Noé, el personaje que dijo ha tenido la mayor influencia tanto a nivel personal como creativo, cuando el realizador estrene su película “Noah” el 28 de marzo de 2014 en Estados Unidos.
“Siempre he apostado por grandes historias con un significado especial para mío. ‘Noah’ es un proyecto muy interesante porque es una historia que cuando eres niño siempre te platican, así que plasmarlo en cine, en un trabajo con dos horas de duración, y tratando de ser lo más fiel al relato original, representó un gran reto como cineasta”, dijo Aronofsky el sábado durante un encuentro con la prensa al término de la conferencia magistral que sostuvo con estudiantes universitarios en el Festival Internacional de Cine de Guanajuato.
El nominado al Oscar en 2011 por “Black Swan” (El cisne negro) contó que su interés por la historia del Arca de Noé surgió cuando era un niño y escribió un poema sobre este personaje bíblico con el que ganó un concurso escolar para leerlo en un acto en Naciones Unidas.
“Creo que esa experiencia me imprimió el coraje y el espíritu para convertirme en escritor. Así que de cierta forma Noah se ha convertido en un patrón que encamina mis esfuerzos creativos”, subrayó.
En “Noah”, basada en el cómic original del canadiense Niko Henrichon, el también realizador de películas como “Pi” y “Requiem for a Dream” reunió a un elenco encabezado por los actores Russell Crowe, Jennifer Connelly, Anthony Hopkins y Emma Watson, quienes dijo “han hecho un gran trabajo”.
“Estoy emocionado por mostrar la gran actuación que Russell (Crowe) pudo hacer con el personaje de Noé. Todos los actores han hecho un trabajo maravilloso y me siento orgulloso de ellos”, dijo el realizador neoyorquino.
Aronofsky destacó que el género bíblico en el cine ha sido muy olvidado, en parte, por la obsesión que la industria cinematográfica en Hollywood tiene con los superhéroes. “¡Honestamente estoy un poco cansado de los superhéroes! El género bíblico es muy interesante, pero lamentablemente muy rezagado por Hollywood. Además de “Noah”, Riddley Scott está trabajando en la historia de Moisés, y sinceramente, me causa mucha curiosidad ver el resultado”.
El realizador contó que otro tema que le ha interesado de forma muy profunda es el de las civilizaciones antiguas, en especial los mayas, tema que retomó en su película de ciencia ficción “The Fountain” (La fuente de la vida), de 2006, donde entrelaza tres historias en distintos espacios atemporales, una sobre esa civilización asentada en el sureste de México y Centroamérica con una historia aproximadamente de 3.000 años.
“A los 18 años viajé por México y Centroamérica con un grupo de amigos. Ese viaje me cambió radicalmente la vida cuando me sumergí en el tema de los mayas. Mi educación, al menos hasta la universidad, siempre estuvo muy enfocada en las culturas europeas, pero luego, cuando estudié Historia Universal, quedé impactado con la sabiduría de los pueblos mesoamericanos”, recordó el cineasta de 44 años.
Aronofsky reveló que uno de los autores latinoamericanos que mayor influencia han tenido en él es el uruguayo Eduardo Galeano, cuyas obras “Memoria del fuego” y “Las venas abiertas de América Latina” le mostraron otra realidad sobre la relación de Estados Unidos con Latinoamérica.
“Siempre me impresionó la forma en que mi país (Estados Unidos) ha tratado a sus indios, contrario al gran interés que otras culturas, como la australiana y la mexicana, tienen por sus pueblos”.
Aronofsky recibió la Cruz de Plata el viernes por la noche como un reconocimiento que la XVI edición del Festival Internacional de Cine de Guanajuato le otorgó, galardón que compartió con su colega, el británico Danny Boyle.