Más de la mitad de los mexicanos (52.3%) padece pobreza patrimonial, lo que significa que sus ingresos son insuficientes para cubrir no sólo sus necesidades básicas de alimentación, salud y educación, sino tampoco requerimientos de vivienda, vestimenta y uso de transporte.

 

Son 61.4 millones los habitantes del país que padecen este tipo de carencias, lo que incrementa en 8.1 millones la cifra oficial de personas en situación de pobreza que dedujo la metodología del Coneval, que es de 53.3 millones.

 

Para el doctor José Luis de la Cruz, director del Centro de Investigación en Economía y Negocios del Tecnológico de Monterrey campus Estado de México, con la actual metodología que el Coneval utiliza en su medición se subestima el nivel de la pobreza, a la vez que se sobrecalifica el efecto de los programas sociales.

 

“Esto se debe sobre todo a las líneas que se han elegido para medir la pobreza. En el momento que se piensa que la canasta básica se puede adquirir con poco más de mil pesos al mes, se nos da una idea de que se requiere muy poco para dejar de ser pobre desde la perspectiva del Coneval”, señaló el especialista a 24 HORAS.

 

La pobreza de patrimonio se mide desde principios de la década de 1990, con base en la Encuesta Nacional de Ingreso y Gasto de los Hogares del Inegi. Según las cifras, que retoma el Coneval, en 1996 este sector alcanzó su nivel más alto al afectar a 69% de la población, 64 millones de personas. Desde entonces se había mantenido una disminución constante hasta 2006, cuando 46.5 millones de mexicanos se ubicaron en esta situación.

 

Desde hace seis años la pobreza patrimonial mantiene una tendencia de crecimiento hasta alcanzar a más de 61 millones de personas en la actualidad. Esto significa un aumento de 15 millones de personas en esta condición durante el último sexenio.

 

De acuerdo con estos datos, uno de cada cuatro habitantes que en la actualidad no pueden cubrir sus necesidades básicas se incorporó al segmento de pobreza patrimonial durante el gobierno de Felipe Calderón.

 

Para 2012, el grueso de la población con pobreza patrimonial es de 52.3%, el mismo que en 1994. Ayer, el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Luis Videgaray, subrayó que el porcentaje de mexicanos en situación de pobreza se ha mantenido esencialmente sin cambio en los últimos 20 años.

 

Desde 2008, la medición de pobreza por ingresos fue sustituida por una multidimensional. La primera consideraba sólo las percepciones económicas de la población y si eran suficientes para satisfacer necesidades como alimentación, vestido, transporte, educación y salud.

 

En tanto, la medición de pobreza multidimensional toma en cuenta, además del ingreso económico, el acceso a derechos sociales, los cuales no necesariamente se cubren con ingresos monetarios, sino también con diversos programas de los gobiernos federal, estatal y municipal, así como otras transferencias de organizaciones sociales o privadas.

 

El académico del Tecnológico de Monterrey señaló que incluso bajo la metodología multidimensional se observa que la población con ingreso inferior a la línea de bienestar fue de 60.5 millones, es decir, 7.2 millones más que la cifra oficial de pobres.

 

Por otra parte, Rosario Cárdenas, investigadora académica del Coneval, dijo en entrevista telefónica que el organismo “reconoce que hay un grupo de población que no tiene problemas con sus derechos sociales, pero que tiene vulnerabilidad económica, y en ese sentido la metodología que aplicamos es la propuesta más amplia para conocer la multitud de realidades que conforman la población mexicana”.

 

“El hecho de tener una medición que no sólo dé cuenta de la situación de ingresos sino también de condiciones que afectan el bienestar y calidad de vida de la población, permite distinguir lo que ocurre en la sociedad y dirigir las políticas sociales hacia las carencias que debemos atacar”, agregó.

 

Para De la Fuente, si bien son metodologías distintas las que se tienen para medir la pobreza, en esencia se observa que el retroceso en los ingresos de las familias y que los programas sociales no sean suficientemente fuertes han sido factores para que no se pueda detener el avance de la pobreza en el país.

 

DATO

 

A 61.4 millones de mexicanos no les alcanza para vivienda, vestimenta y uso de transporte, además de padecer carencia alimentaria