A partir de textos fechados desde Nueva York (EU), París (Francia) y Coyoacán (México, DF) que muestran la cotidianeidad, miedos y anécdotas de la artista plástica Frida Kahlo (1907-1954) fue creado el espectáculo “Las cartas de Frida, ópera de toilette”, con música de Marcela Rodríguez y la dirección escénica de Jesusa Rodríguez y Clarissa Malheiros.
El montaje ofrecerá funciones en el Teatro de la Ciudad “Esperanza Iris”, del 23 al 25 de agosto, se informó hoy en rueda de prensa, donde la directora y actriz Jesusa Rodríguez aseguró que lo más importante de este trabajo es que es una ópera, y cuando se habla de Frida hoy en día se hace en dos sentidos, el de la artista y el del terrible uso comercial que se ha hecho de su obra.
Estas dos Fridas como ella las plantea están reflejadas en sus cartas, donde se observa un enfrentamiento consigo misma y su propia soledad.
“Entonces sentimos que lo más importante de asumir un personaje es definitivamente rescatar la autenticidad de su obra, porque realmente pensamos que Frida fue una artista que tocó la esencia de sí misma, que no estaba en la frivolidad de la moda y no es fácil (detectarla) hasta que uno se mete en su vida y empieza a leer sus cartas”, explicó.
Destacó que fue un acierto de Marcela Rodríguez haber tomado las cartas para hacer este trabajo y partir de la autenticidad de la artista; rescatar la labor de Frida.
La puesta en escena, agregó Jesusa, va orientada a tratar de hacer un retrotratamiento de la obra de Frida y con esta ópera la gente tenga otra ventana para mirar la obra de la artista plástica.
Las cartas y diarios son el hilo conductor de esta propuesta escénica que ofrece un lado poco conocido de Frida: el de la mujer que analiza la creación artística, las políticas del surrealismo, el dolor físico, sus turbulentas relaciones personales y sus ideales, sin perder el sentido del humor.
“Las cartas de Frida, ópera de toilette” está escrita para nueve instrumentos, una soprano y tres actores. La ópera de cámara presenta un sincretismo entre el minimalismo y el posmodernismo, al crear texturas de un color mexicano contemporáneo.
El equipo creativo está conformado por el director concertador Christian Gohmer, el ensamble de música contemporánea Tempus Fugit, la cantante Catalina Pereda, los actores Natyeli Flores, Carlos Brown y Roldán Ramírez.