La Policía Federal Ministerial de la Procuraduría General de la República (PGR) dejará de existir bajo ese nombre y organización en los próximos días para convertirse en la nueva agencia de investigaciones que trabajara a través de células especializadas en distintos delitos.
El titular de la PGR, Jesús Murillo Karam, señaló ayer que en los próximos días se presentará este órgano investigador, cuyo nombre definitivo aún está por definirse, y que tiene la encomienda de ser un cuerpo de analistas y no de policías.
“Tendremos que crear, de a de veras, una agencia de investigación. Es otro riesgo que ha tenido ese tipo de cuerpos, lo primero que estamos tratando de hacer es quitarle el carácter de policía, no son policías, son investigadores”, afirmó.
Se trata, abundó Murillo, de contar con un órgano que construya una investigación previa confiable, con elementos suficientes que le permitan al juez resolver con certeza si es necesario procesar a la persona o no, y bajo qué criterios.
“Lo que necesitamos es tener un cuerpo investigador serio, confiable, científico, con tecnología, con capacidades modernas para combatir una delincuencia moderna, a veces más moderna que quien la persigue”, agregó en su participación en un seminario sobre violencia en el Colegio de México.
El procurador reconoció que uno de los aspectos más complejos en la conformación de esta nueva agencia, dada su especialización, ha sido el reclutamiento de agentes, tanto en la selección de los que se quedarán entre los que están en la PFM, así como de nuevo aspirantes.
Para ello dijo que han contado con el apoyo de universidades como la de Nuevo León y la UNAM, y se están formando además convenios con otros planteles.
“Necesitamos especialistas en homicidio, unos especialistas en secuestro, unos especialistas en extorsión, nuestros analistas, nos hacen muchísima falta análisis con una gran preparación a los que tenemos que pagarles, no como policías”, indicó.
Dentro del nuevo esquema, el cuerpo investigador trabajará con el equipo de peritos de la institución, el cual según Murillo, está bien conformado desde la administración anterior. Esto para consolidar investigaciones “científicas”.
Lo que sí adelantó es que será necesario construir al menos cinco centros periciales por región en los próximos meses y años.
Murillo añadió que la segunda fase del proceso de reestructura de la PGR comprenderá el trabajo del Ministerio Público en el interior del país, que es donde está 80% del trabajo de la dependencia, y a donde tendrá que dirigirse la mayoría del presupuesto, y no a la capital como sucede ahora.
Carece PGR de bases de información
Al platicar el diagnóstico de la PGR, Murillo reconoció que la dependencia carece de bases de datos científicas y de información suficientes que permitan consolidar investigaciones sólidas.
“Es increíble que no los tengamos y que son sustanciales de la investigación, no tenemos un banco que nos permita saber el registro de todos los vehículos (…) No tenemos un verdadero banco nacional de huellas dactilares, es posible que lo haya en alguna de las policías, pero es de esas policías, y aquí lo que se requiere es que sea información pública y nacional,”, indicó.
Destacó que la PGR cuenta con un centro de ADN pero que no “nos funciona de mucho” porque no hay un banco de datos genéticos, y tampoco hay un banco sobre averiguaciones previas que permita generar inteligencia.
Murillo dijo que se trabaja en todo estas deficiencias pero subrayó que se trata de un trabajo que llevará años y que tiene que iniciarse ya.