Sandra Ávila Beltrán, conocida como “La Reina del Pacífico”, se encuentra en una cárcel de El Paso, Texas, a la espera de su inminente deportación a México, que podría ocurrir en las próximas horas, informó su abogado Stephen Ralls.
Ávila Beltrán, de 52 años de edad, fue entregada el pasado 30 de julio al Departamento de Inmigración y Aduanas (ICE) en Miami para su deportación al vecino país y desde entonces ha estado en centros de detención en Florida, Louisiana y ahora en Texas.
La mexicana fue entregada al ICE tras cumplir una pena 70 meses de cárcel que le impuso el juez federal de Miami, Michael Moore, quien consideró su pena terminada tras pasar cinco años presa en México y uno en Estados Unidos.
El abogado Ralls atribuyó el amplio tiempo para la deportación de su defendida a que el caso es “especial” y por eso se han tenido que tomar precauciones para determinar el lugar en donde será entregada. Ávila Beltrán fue extraditada a Estados Unidos en agosto de 2012.
Tras un acuerdo con la fiscalía, la mexicana se declaró culpable en abril pasado del delito de asistencia económica a su exnovio, el colombiano Juan Diego Espinosa Ramírez, “El Tigre”, enlace entre el mexicano cártel de Sinaloa y el colombiano del Norte del Valle.
Con el acuerdo, la mujer evitó ir a un juicio en el que hubiera enfrentado el cargo de asociación ilícita para importar y distribuir cocaína en Estados Unidos y una pena mayor en caso de ser declarada culpable.