BEIRUT. Un día después de que la oposición siria denunciara la muerte de más de mil 300 personas en aquel país el miércoles pasado, en varios ataques químicos lanzados por el gobierno del presidente Bachar al-Assad, el hecho seguía sin esclarecerse.

 

Pese a la existencia de videos y fotografías de lo ocurrido no hay certidumbre de cuántas víctimas hay o quién las asesinó.

 

El régimen niega que haya usado armas químicas en su operación con artillería contra la región de Guta, y afirma que son acusaciones “absolutamente infundadas”.

 

Pero incluso cuando hay videos y testimonios sobre el presunto ataque, fue imposible confirmar con precisión cuántas personas fueron asesinadas y qué las mató.

 

Los miembros de la oposición acusan al gobierno, el gobierno niega todo y Rusia acusó a los rebeldes de animar el debate para implicar al gobierno del presidente Al-Assad en esa acción.

 

Ante el hecho, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas se reunió de urgencia y consideró necesaria una “investigación independiente e inmediata” que aclare lo sucedido, pero no emitió ninguna resolución de condena.

 

Aunque hace varios días que el equipo de expertos de ONU llegó a Damasco al frente de Ake Sellstrom para verificar si durante el conflicto en ese país, desde 2011, se han empleado armas químicas, el subsecretario general del organismo, Jan Eliasson, manifestó que “en este momento” no se puede acceder a la zona “por la situación de inseguridad”.

 

La sesión del Consejo de Seguridad convocada por Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Luxemburgo y Surcorea, discutió un borrador en que el organismo se alista a “dar urgentemente los pasos necesarios para que el ataque sea sancionado”.

 

Sin embargo, el documento quedó pendiente por los reparos de Rusia y China, miembros permanentes del Consejo y que se oponen a que los expertos en armas químicas de la ONU se desplacen a Siria sin aprobación del gobierno de Al-Assad.

 

Un equipo de 20 miembros de la ONU encabezado por el experto sueco en armas químicas Ake Sellstrom está desde el domingo en Damasco para investigar tres sitios donde habrían ocurrido ataques con armas en el pasado: el pueblo de Khan al-Assal, al oeste de la ciudad asediada de Alepo, y otros dos lugares que se mantienen en secreto por razones de seguridad.

 

Versiones opuestas

 

Los opositores denuncian que las fuerzas gubernamentales continuaron el jueves con su ofensiva contra los suburbios del este de Damasco que están bajo control rebelde.

 

En tanto, el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña, dijo que no tenía datos sobre víctimas en el bombardeo del jueves contra Guta.

 

Otro grupo, los Comités de Coordinación Local, reportó varias incursiones de las fuerzas gubernamentales sobre los suburbios.

 

Por su parte, el gobierno del presidente Bashar al-Assad desmintió la víspera un supuesto ataque con ese tipo de armamentos por parte del Ejército en las afueras de la capital y argumentó que las acusaciones pretenden sugestionar a la opinión pública para justificar una intervención armada. Un oficial del Ejército sirio calificó de “falsa” la denuncia de la oposición sobre el supuesto ataque químico y la atribuyó a la “histeria” opositora por su debilidad.

 

El ministro sirio de Información, Omran Zoabi, aseveró que son calumnias “ilógicas y fabricadas” que buscan alterar el trabajo de los inspectores de las Naciones Unidas que están en Damasco desde el domingo pasado para investigar otros ataques similares.

 

Mientras tanto, en Estados Unidos, el senador republicano John McCain criticó el rechazo del presidente Barack Obama a intervenir en ese país árabe ante la cadena televisiva CNN y reiteró su llamado a una política más dura de Washington contra Siria, tras las afirmaciones de que las Fuerzas Armadas de ese país utilizaron armas químicas, acusación que rechazan las autoridades de Damasco.

 

Crónica

 

 

La presunta incursión de bombarderos con arsenal químico sobre los barrios de Guta del este y Zamalka dejó decenas de personas muertas, cuyos cadáveres envueltos con mantas blancas son visibles en videos de aficionados, si bien su pálida piel no presenta ninguna herida.

 

Las imágenes de los niños muertos que yacían hombro con hombro en las habitaciones, y de otros que recibían tratamiento para problemas respiratorios, provocan conmoción en todo el mundo.

 

La mayoría de los muertos fueron enterrados horas después del ataque en tumbas colectivas en diferentes zonas, todo fue con rapidez por temor a que los cuerpos se descompongan por el calor. Las víctimas no identificadas fueron fotografiadas y marcaron sus tumbas con un número en caso de que sus seres queridos vengan en el futuro a recoger sus cuerpos, dijo un testigo que agregó: “La mayoría de los muertos fueron enterrados en fosas comunes”.

 

DATOS

 

–       En marzo de 2011 comenzó la crisis civil en Siria que ahora es una guerra civil.

–       Más de 100 mil personas han muerto en el conflicto, según datos de la ONU.

–       Más de 300 mil refugiados hasta julio.

–       Hay dos grupos opositores. la Coalición Nacional Siria y la Coalición Nacional para las Fuerzas de la Revolución y la Oposición Siria (CNFROS)