Hay que usar ropa cómoda en casa, es cierto, pero hay que asegurarse de poner un poco de esfuerzo extra en la apariencia para aportarle estilo.
¿Cómo lograr esto?
Primero, hay que pensar que, sólo porque la ropa que uno elija sea cómoda, no necesariamente significa que debe verse desaliñada o descuidada. Por ejemplo, un atuendo de yoga, con estilo, en colores atractivos puede ser muy adecuado. Sólo hay que asegurarse de que el atuendo este bien adaptado y que saque provecho de nuestra figura. Cabe aclarar que estar cómoda no significa usar ropa tres tallas más grande.
Otra recomendación son pantalones cortos con jareta en la cintura y una playera.
Es recomendable optar por telas que sean naturales, por ejemplo de algodón, que además de dar amplitud a los movimientos son muy frescas en temporada de calor.
Los caftanes y túnicas ligeras son ideales para un día de relajación en el verano, ya sea dentro de casa o junto a una alberca.
En cuanto a accesorios, no hay una regla que diga que a la ropa cómoda le deben faltar. Con ellos, un atuendo agradable puede lucir muy casual. Hay que buscar joyas, cinturones, zapatos o bolsos para resaltar el look. Sólo se deben evitar los accesorios que se vean forzados y ridículos al combinar con el vestuario. Ten presente que todo en conjunto debe seguir la misma línea casual para que tenga congruencia.
La ropa interior también cuenta. No hay nada más cerca de nuestra piel que esos pocos centímetros de ropa. Por eso, antes que nada no debe causar dolor ni quedar apretada y se puede convertir en parte del estilo. Muchas mujeres imprimen su sello sexy en estas prendas. Hay que tomarlo en cuenta.
No se debe olvidar el cabello y el maquillaje. Como cualquier accesorio, estos elementos también deben ir de acuerdo con la imagen.
Hay que asegurarse de acompañar el aspecto relajado con un maquillaje simple y un peinado sencillo.
Finalmente, es importante transmitir confianza para verse bien y para que la gente alrededor lo note.
Una persona que usa ropa cómoda y una amplia sonrisa parecerá más accesible que otra usando un atuendo impecable y un gesto tímido.