Representantes de todas las áreas de seguridad del gobierno federal se reunieron ayer para analizar los escenarios de riesgo por la movilización de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), que de acuerdo con los reportes discutidos en las dos sesiones que mantuvieron, se vio reforzada con cientos de maestros disidentes de Chiapas y Oaxaca, que llegaron en más de 75 autobuses desde el domingo por la noche, y ante la expectativa que en las próximas 48 horas aumenten su número en 15 mil en la ciudad de México.
De acuerdo con información recabada por 24 HORAS, en las reuniones se discutió la atomización de los diferentes grupos que integran a la CNTE, por lo que concluyeron que no existen liderazgos claros con los que se pueda establecer una negociación política donde los acuerdos se respeten.
Identificaron, además, lo que denominaron “un serio riesgo” para el manejo y control de daños, de acuerdo a lo que explicó una fuente consultada que “hay líderes que no se ven, que están atrás operando y que no han sido identificados, pero son los que han diseñado la estrategia de movilización e identificación de puntos sensibles que les ha permitido hacer ruido y controlar espacios públicos”.
En las sesiones de trabajo, en donde se declararon en total alerta las oficinas de seguridad federales, participaron representantes de la Secretaría de Gobernación, de la Comisión Nacional de Seguridad, de Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN), el Ejército, la Marina, Estado Mayor Presidencial y la Procuraduría General de la República (PGR).
A través de distintas fuentes, se pudo confirmar que se reconoció en las sesiones de trabajo que se cuenta con información suficiente y confiable que permita conocer los planes y capacidad operativa de la CNTE.
Por el momento se identificaron cuatro blancos que, en cualquier momento, podrían ser “tomados” por grupos de entre 3 y 5 mil maestros en la Ciudad, se trata de la Residencia Oficial de Los Pinos, la Cámara de Diputados, el Aeropuerto de la Ciudad de México y Campo Marte.
Para frenar cualquier acción, ayer se movilizaron Policías Federales en San Lázaro, con unos 3 mil efectivos; el Aeropuerto con alrededor de 400 agentes, y dentro de Los Pinos se reforzó la seguridad por parte del Estado Mayor Presidencial.
Se decidió que en el Campo Marte se llevaría a cabo el mensaje de Enrique Peña Nieto por el Primer Informe de Gobierno, por ser un lugar en el que se podría controlar y contener cualquier amenaza a la seguridad, pero ante la posibilidad de que entre el jueves y viernes los maestros tomen la zona, se definió posponerlo y discutir qué otros lugares podrían utilizarse para el discurso presidencial.
Seguridad en manos de PF
Por ahora y hasta 48 horas de que se lleve a cabo el mensaje presidencial, la estrategia de seguridad vinculada el Primer Informe de gobierno en la Ciudad de México estará a cargo de la Policía Federal (PF). En cuanto se defina el día en que se celebre este evento, el Estado Mayor Presidencial (EMP) tomará el control de la seguridad de la ciudad.
Autoridades de la PF indicaron a este diario que, por ahora, el despliegue de vigilancia está centrado en mantener la integridad de cinco puntos: el Palacio Legislativo de San Lázaro y el Senado de la República, además de Los Pinos, el Campo Marte.
En varios de estos puntos se trabaja en coordinación con EMP y Fuerzas Armadas, pero será la Policía Federal la responsable de contener intentos de invasión o violación del cerco de seguridad.
La fuerza operativa en estos despliegues corresponde principalmente a elementos de las Divisiones de Seguridad Regional y de División de Fuerzas federales, en por lo menos 3 mil 500 elementos por ahora, pero todos los agentes federales y en las Fuerzas Armadas fueron suspendidos sus descansos.
Un tercer cinturón de seguridad, que servirá de apoyo, será la policía capitalina, de la que tomará el mando el gobierno federal en las próximas horas en las delegaciones Cuauhtémoc e Hidalgo, además del Agrupamiento Metropolitano.
Cibervigilancia
Por primera vez en la antesala de un Informe de Gobierno, la Policía Federal implementó un operativo especial a través de la Policía Cibernética, a consecuencia de las amenazas, a través de Internet que han hechos diferentes organizaciones que incluyen ataques a los sistemas de las oficinas gubernamentales.
Los patrullajes en la red se llevan a cabo también para identificar el origen de las diferentes amenazas y de la invitación que se ha hecho para movilizaciones a grupos radicales y que aseguran habrá “sorpresas” en lo que han denominado #1Smx.