La Firma
Solo un día después de tomar posesión como presidente de la República, Enrique Peña Nieto reunió a las principales fuerzas políticas del país para conformar un acuerdo nacional inédito en la historia de la política mexicana. El Pacto por México, firmado el 2 de diciembre de 2012, logró congregar a partidos de ideología sumamente distintas: PRD, PAN y PRI, que acordaron impulsar acciones conjuntas con el Ejecutivo federal para cambiar el rumbo de México.
En sus inicios, los compromisos de Peña Nieto significaron los mismos 95 compromisos englobados en cinco grandes acuerdos del Pacto: sociedad de derechos y libertades; crecimiento económico, empleo y competitividad; seguridad y justicia; transparencia, rendición de cuentas y combate a la corrupción; y gobernabilidad democrática. Mismos que se convierten en
Aunque los primeros nueve meses han sido de estira y afloja dentro del Pacto, que para muchos significó una intención de Enrique Peña para legitimar su gobierno, otro objetivo es impulsar las reformas en las Cámaras de Diputados y Senadores. En el último corte sumaban 30 compromisos avalados en el seno de los acuerdos y la gran mayoría siguen en discusiones.
El Adéndum
Se acercaban las primeras elecciones a cargo de la nueva administración federal y las acusaciones entre partidos de usar mano sucia y recursos públicos en el proceso electoral, se hacían cada vez más fuertes.
A pesar de la firma del Pacto se registró un resquebrajamiento de los acuerdos, lo que obligó al gobierno federal a lanzar un Adéndum al Pacto por México, es decir, se sumaron 11 compromisos más para garantizar la limpieza en los comicios del domingo 7 de julio.
Por tanto, el 7 de mayo, el Pacto consiguió mantener su vigencia y en un evento protocolario se incorporaron algunos candados para evitar que los partidos usaran recursos públicos con fines electorales, impulsar mayor transparencia en el proceso electoral, además de adelantar las negociaciones de la reforma electoral y combate a la corrupción, así como transparencia.
Sin embargo, siguió la guerra sucia en las votaciones que se celebraron en 14 entidades de la República.
Amagues de rompimiento
El proceso electoral concluyó y el PRI se impuso ante la oposición dando pie a los primeros amagues de romper por completo los acuerdos signados por el Pacto por México.
Tras las elecciones del 7 de julio, las dirigencias nacionales del PAN y PRD se pronunciaron por dejar el acuerdo a razón de presuntas irregularidades a manos del PRI, acusados de compra y cooptación del voto.
“Lo que se vio en la jornada es una política del México del pasado, de querer ganar a la mala”, denunció en ese momento el líder del PAN, Gustavo Madero. Mientras que Silvano Aureoles, coordinador del PRD en la Cámara de Diputados, señaló que las reformas energética, hacendaria y financiera “entrarían en crisis” por la intervención de los gobernadores priistas en los procesos electorales para favorecer a sus candidatos.
Otro de los momentos que vivió el Pacto, fue de las corrientes perredistas que presionar a la dirigencia nacional del Sol Azteca para abandonar el acuerdo político.
Los días 10 y 11 de agosto, fin de semana que reunió al Consejo Nacional del PRD, diversas corrientes, entre estas IDN (de René Bejarano) y Movimiento Progresista (de Marcelo Ebrard), exigieron la salida inmediata de su partido del Pacto por México ya que este impulsa la iniciativa de reforma energética del gobierno federal, calificada por los perredistas como privatizadora.
El debate fue largo. Ante una falta de acuerdos, ADN y Nueva Izquierda o la corriente de “los Chuchos” liderada por el presidente nacional del PRD, Jesús Zambrano, alargaron la reunión y llegaron a la conclusión de que el Sol Azteca mantendría su lugar en el Pacto.
El balance a casi un año
Tras nueve meses de firmado, el Pacto por México lleva un avance de 30 compromisos avalados (de un total de 106), que fueron priorizados por ser estratégicos para el desarrollo del Estado mexicano, además la mayoría de los puntos está en negociaciones.
Según los interlocutores del Consejo Rector del Pacto, los compromisos cumplidos tienen que ver con los temas de la transparencia y las reformas al IFAI; la reforma a la competencia económica; la reforma en telecomunicaciones y la reforma educativa. Pero esta última aún tiene pendiente la Ley general del Servicio Profesional Docente.
Las que avanzan son la reforma lectoral, reforma política del DF, creación de una Ley de Partidos, reelección de legisladores, creación de un código penal único y la reforma financiera.
Aún con los avances, el Pacto aún no tiene fecha para iniciar las discusiones en torno a las iniciativas de reforma energética y hacendaria, en las que se espera un debate cerrado por las distintas posturas de partidos y Ejecutivo federal.
La manzana de la discordia
La reforma educativa se ha convertido en la manzana de la discordia de la actual administración y del Pacto por México.
Con las movilizaciones de los maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) los acuerdos políticos se han visto atrasados y con la obligación de abrirse a mesas de negociación. Esto fue a consecuencia de que con una nueva Ley general del Servicio Profesional Docente se prevé un sistema de evaluación docente tanto para el ingreso como para la promoción y permanencia en el servicio docente tanto en educación básica como media superior.
No obstante, los legisladores y partidos políticos están dispuestos a votar las leyes secundarias que tienen que ver con la tercera ley secundaria del Servicio Profesional Docente en la primera semana de septiembre.
LOS QUE FIRMARON:
Enrique Peña Nieto, presidente de México.
María Cristina Díaz Salazar, presidenta del Comité Ejecutivo del PRI.
Gustavo Madero Muñoz, presidente Nacional del PAN.
Jesús Zambrano Grijalva, presidente Nacional del PRD.
LOS INTERLOCUTORES
Jesús Zambrano Grijalva, presidente del Consejo Rector del Pacto por México.
Gobierno federal:
Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación.
PAN:
El coordinador de la Comisión Política, Santiago Creel Miranda,
La senadora, Rosa Adriana Díaz Lizama
El ex gobernador, Marco Antonio Adame Castillo
PRD
El ex dirigente del PRD, Jesús Ortega.
El diputado federal, Guadalupe Acosta
El ex senador, Pablo Gómez
PRI
César Camacho Quiroz, dirigente nacional del PRI.