El formato para la ceremonia del Primer Informe del Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, está casi listo y se perfila que durante el discurso sobre su gestión no habrá preguntas de los integrantes de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.
Federico Döring y Miriam Saldaña, legisladores locales del PAN y PT, respectivamente, confirmaron a 24 HORAS que, a través de la duda parlamentaria (preguntas por escrito) los legisladores podrán cuestionar al Jefe de Gobierno respecto a los primeros nueve meses de su administración en el gobierno de la capital.
Los diputados también confirmaron que el Ejecutivo local sí asistirá al recinto parlamentario a dar su informe; sin embargo, lo hará después de los posicionamientos de las fracciones parlamentarias. Sólo acudirá a emitir su discurso y posteriormente se retirará del evento.
Los legisladores consultados coincidieron que este nuevo formato no permite la oportunidad de diálogo entre diputados y el gobernante, a diferencia de informes anteriores donde había una ronda de preguntas.
Döring explicó que aunque aún no se da el voto final para avalar dicho formato al interior de la Comisión de Gobierno, “es un hecho que se usará el próximo 17 de septiembre”.
Al cierre de esta edición, la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa se reunió para debatir cuál sería el formato a utilizar para la ceremonia del 17 de septiembre, pues Mancera propuso también enviar su informe de manera escrita y que los legisladores lo analizarán, tal como lo hace el titular del Ejecutivo Federal, con su informe al entregarlo al Congreso de la Unión.
Antes, el presidente de la Comisión de Gobierno, Manuel Granados, realizó un sondeo con los diversos coordinadores parlamentarios para que aprueben un nuevo formato, que consistiría en que el mandatario local acuda al recinto de Donceles y Allende, entregue su informe de labores y se retire. Un día después, en el Auditorio Nacional, realizaría el evento oficial.
Las propuestas
El coordinador del PAN en la ALDF, Federico Döring, explicó que su bancada propuso un formato diferente en donde el Jefe de Gobierno, al acudir a dar su informe, escuche la postura de los grupos parlamentarios y se use un esquema federal de pregunta parlamentaria; es decir, que se haga un cuestionamiento por escrito y el Ejecutivo local la responda en el recinto.
Acusó que en el último informe de gobierno, cuando era Jefe de Gobierno Marcelo Ebrard, los formatos incluían preguntas, por lo que califica de “incongruente” al PRD, pues se autodenomina progresista cuando no acepta que se interrogue a sus gobernantes.
Por su parte, la legisladora del PT, Miriam Saldaña, confirmó que las dudas que tengan los legisladores sobre el informe se enviarán a través de preguntas escritas, las cuales el Jefe de Gobierno tendrá una fecha límite para responder a las inquietudes de los asambleístas.
Afirmó que este formato ya se aprobó al interior de la Comisión de Gobierno de la Asamblea, y que en estos días se llevaría al pleno para su aprobación.
Saldaña subrayó que la propuesta sobre el protocolo de la ceremonia fue hecha por el PRD y lamentó que pese a las voces en contra de esta propuesta al interior de la comisión, los integrantes de la comisión votaron a favor de esta propuesta.
Los 100 días
Al cumplir 100 días al frente del GDF, el 14 de marzo pasado Miguel Ángel Mancera refrendó su compromiso de mantener el diálogo con todas las fuerzas políticas y autoridades de los tres niveles de gobierno.
En el Auditorio Nacional y sin la presencia de sus antecesores Marcelo Ebrard y Andrés Manuel López Obrador, dijo que su administración quiere dejar huella en el Distrito Federal con una izquierda “sin dueños”, propositiva, inteligente y ordenada en favor de ciudad.
Ante la presencia del dirigente nacional del PRD, Jesús Zambrano, del fundador de ese partido, Cuauhtémoc Cárdenas, y del líder de la corriente Izquierda Democrática Nacional (IDN), René Bejarano, Mancera expresó que “el Gobierno de la Ciudad debe de dialogar con todas las autoridades, municipales, estatales y federales. No tengo confusión entre los valores políticos y la responsabilidad institucional. La izquierda es una forma de independencia, nunca una atadura, es un símbolo de libertad, sin distingos y yo debo de gobernar para el bien de todos”.