WASHINGTON. Aaron Alexis, el presunto autor del tiroteo que provocó la muerte de otras doce personas, este lunes en Washington, tenía desórdenes mentales, en ocasiones no distinguía la realidad de sus fantasías y llegaba a escuchar voces.

 

La cadena CBS, informó hoy que el individuo “tenía problemas mentales por lo que pidió ayuda al Departamento de Veteranos varias veces. Tenía episodios por los que estaba tratando de conseguir tratamiento”, explicó el ex asistente de dirección del FBI John Miller.

 

“Dijo que oía voces, perdía la consciencia de la realidad en ciertas ocasiones. Buscó tratamiento varias veces en varios lugares y también terminó frustrado”, agregó Miller.

 

Aunado, el padre de Alexis aseguró en investigaciones anteriores a este hecho, que sí padecía un trastorno de estrés postraumático (PTSD, en inglés) a raíz de su participación en las tareas de rescate en los ataques de las Torres Gemelas, el 11 de septiembre de 2001, lo que le causaba problemas de comportamiento.

 

Mientras continúan las investigaciones para dilucidar cuál fue la causa de su acción, varias fuentes cercanas al caso han afirmado que Alexis llevó a cabo el ataque con tres armas: un rifle de asalto, una pistola y una escopeta, que adquirió de manera legal recientemente en una tienda de armas en el estado de Virginia, pese a sus supuestos trastornos.

 

El Buró Federal de Investigaciones (FBI) ha asegurado que aún no tiene una fotografía completa del pasado de Alexis, pero ha descartado que tuviese alguna conexión o vocación terrorista.