Ante la acusación Juan Cortina Gallardo, presidente nacional de la Cámara Azucarera y Alcoholera, la senadora panista Marcela Torres Peimbert aseguró que es un orgullo que las asociaciones mexicanas consiguieran financiamiento de fundaciones internacionales, como Bloomberg Philantropies.

“La Fundación Bloomberg no es ninguna delincuente y se encarga de promover cuestiones de salud y de movilidad. Es una fundación como cualquier fundación en el mundo y que ellos estén financiando asociaciones en México me parece loable de estas asociaciones que sean tan serias y sean capaces de captar donativos internacionales”, dijo en entrevista.

 

24 HORAS informó el viernes pasado que el alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, entregó 10 millones de dólares a cabilderos mexicanos para que se incluyera un impuesto de un peso por cada litro de refresco que se consuma en este país.

 

El dinero está a disposición de la firma de cabildeo Polithink, El poder del consumidor y el Instituto Nacional de Salud Pública, que tienen en marcha una campaña publicitaria en contra de los refrescos desde el año pasado.

 

“El señor Bloomberg ofreció incentivos por 10 millones de dólares a los promotores de la iniciativa para cobrar un impuesto a los refrescos en México”, manifestó Emilio Herrera Arce, director general de la ANPRAC.

 

El multimillonario estadunidense a través del programa de prevención contra la obesidad de Bloomberg Philanthropies se comprometió a dar los recursos económicos en un periodo de tres años, para apoyar las políticas de salud pública que están enfocadas a reducir la obesidad en México.

 

“Un impuesto a las bebidas azucaradas no ayudará a combatir la obesidad y gente extranjera desinforma al presidente, Enrique Peña Nieto y al secretario de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray Caso”, manifestó Juan Cortina Gallardo, presidente nacional de la Cámara Azucarera y Alcoholera.

 

Cortina Gallardo acusó a la senadora del PAN, Marcela Torres y al senador del PRD, Mario Delgado, de “atizar las aguas usando recursos económicos extranjeros”, para dañar la industria que él representa.

 

“Con un impuesto populista no se arreglará el problema de la obesidad en el país”, manifestó el dirigente empresarial que apoyó la campaña presidencia de Enrique Peña Nieto a través de Consejo Consultivo Empresarial para el Crecimiento Económico y el Empleo instalado el 23 de abril de 2012.

 

La senadora, quien impulsa también desde el año pasado la aplicación del impuesto al refresco, señaló que se tienen que tomar las medidas necesarias para combatir los problemas de obesidad y sobrepeso, que afectan a 70% de la población.

 

“No tenemos nada en contra de la industria. Si estos señores ven afectados sus intereses económicos, bueno, eso es distinto”, subrayó.

 

Sin embargo, no quiso responder a los señalamientos en su contra, como una de las responsables de “mover las aguas” en el terreno político, junto con el perredista Mario Delgado, para aprobar el impuesto.