En menos de 30 segundos, uno de los cuatro cerros que rodea La Pintada, una pequeña población de unas 500 personas se desgajó y barrió con todo a su paso. Esta es la única población que desapareció en un 85% tras las intensas lluvias que dejó a su paso la tormenta tropical “Manuel”.
La Pintada, comunidad enclavada en la sierra cafetalera del municipio de Atoyac de Álvarez, en la costa Grande de Guerrero celebraba este 16 de septiembre la fiesta del pueblo por el Día de la Independencia. Pasadas las tres de la tarde, el alud de agua, tierra y lodo sepultó casi todo el poblado. Aquí la gente estima que al menos 100 personas quedaron enterradas.