El embajador de Estados Unidos en México, Anthony Wayne, hizo ayer un reconocimiento al “buen trabajo” que hacen los periodistas de este país con sus reportajes contra la trata de personas y la corrupción.

 

Estimó que las investigaciones periodísticas “ayudarán a hacer la diferencia para socavar este horrible crimen”.

 

Agregó que sin periodistas curiosos, diligentes y honestos, las sociedades y las democracias no funcionan bien, pues el trabajo periodístico “ayuda a limpiar la corrupción y otras actividades ilegales en las áreas en las áreas que cubren al permitir que las transparencia ilumine e informe a los ciudadanos”.

 

Wayne afirmó que entiende la importancia de la labor periodística para la democracia porque el mismo fue periodista y corresponsal del Christian Science Monitor. En ese sentido lamentó la noticia de que México fue calificado el año pasado por organizaciones internacionales “como el país más peligroso para ejercer  el periodismo en las Américas”.

 

Debido al peligro que viven diariamente los reporteros mexicanos, la Embajada de Estados Unidos en el país impulsó iniciativas para trabajar con los medios de México y Estados Unidos en torno a las cuestiones profesionales de los periodistas, como la protección y la realización de reportajes en ambientes violentos.

 

“El año pasado capacitamos a más de 300 periodistas mexicanos y profesionales de los derechos humanos en cuanto a las prácticas, las herramientas y tecnologías para que se protejan a sí mismos y a su trabajo, y planeamos llegar a cientos más en los años venideros”, dijo Wayne.

 

El embajador también señaló que la embajada participa en la capacitación de policías federales y estatales, al igual que al personal de la unidad del gobierno de México que asiste a las víctimas de violaciones a los derechos humanos.

 

En este sentido, más de 250 oficiales han recibido este año certificados de maestría en derechos humanos con fondos de USAID.