El sector privado del país propuso que el incremento de recursos para el Fondo de Desastres Naturales (Fonden) emane de una reasignación en el gasto corriente, a fin de evitar un incremento de la deuda gubernamental.

 

Los presidentes del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Gerardo Gutiérrez Candiani y de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Juan Pablo Castañón, coincidieron en que si se limitan gastos personales innecesarios y se eficientan programas de gobierno, el fondo para la reconstrucción se incrementaría favorable y suficientemente.

 

“Hay mucho dinero y muchos programas que se podrían eficientar, recursos que podrían ser destinados a reactivar la vivienda y planta productiva; lo que es fundamental si realmente se quiere salir en el corto plazo de la situación”, declaró Gutiérrez Candiani.

 

En ese sentido, planteó que en estos momentos lo que se tiene que mandar es el apoyo humanitario para la reconstrucción de la vivienda y proteger el empleo, por lo que consideró urgente implementar un programa temporal del empleo en las zonas afectadas.

 

“Entonces, sí tenemos que hacer un esfuerzo como Estado mexicano para brindarles todo el apoyo que necesiten y me refiero a tratar de apoyar en todo”, enfatizó.

 

Particularmente al micro y pequeño empresario, indicó, tiene que dársele apoyo para reiniciar sus negocios con capital de trabajo, créditos blandos y tasas cero para que puedan reponer sus maquinarias, equipos y oficinas, con lo que se podrá reactivar la economía de las poblaciones.

 

Por su parte, el presidente de la Coparmex, Juan Pablo Castañón, consideró que en momentos como los actuales es muy importante que se reasignen los recursos para atender las consecuencias de estos graves problemas meteorológicos.

 

No obstante, se debe tener cuidado de no financiar la reconstrucción con deuda, sino a través de la reasignación del gasto público, advirtió.

 

“La visión que tenemos es cómo lo vamos a aplicar y por qué no, aprovechar la oportunidad para construir las carreteras que merecemos con los materiales que merecemos en las zonas de acuerdo a la peligrosidad de cada una”.

 

Agregó que debe haber una aplicación estricta de la ley para los funcionarios públicos que autorizan asentamientos en donde no deben existir.

 

“Sabemos que debemos crear las vialidades, no por donde nos guste, o sea capricho de la autoridad, sino por dónde deban ser y queden protegidas para crear los asentamientos adecuados”, indicó.

 

Toda esa normatividad, apuntó Castañón, debe quedar asentada en la reconstrucción con una reasignación de recursos de programas que no se han ejercido con reasignación de gasto público y no endeudamiento, insistió.

 

Enfatizó que los rubros que no deben sacrificarse en el presupuesto son los de infraestructura, educación y salud; “pero el resto de servicios personales tienen que ajustarse”.

 

Se debe también cuidar que los fondos adicionales que se incluyan para dar alivio a las regiones afectadas se enfoquen en inversión productiva, que busquen reactivar las economías locales, para generar empleos y oportunidades, y no simplemente a la atención primaria de las necesidades urgentes.

 

“Sólo así podrá salirse de la emergencia y consolidar soluciones de largo plazo”, concluyó el dirigente de Coparmex.