Después de protagonizar una dura pelea en las redes sociales, donde se aventaron hasta el molcajete, Kanye West y Jimmy Kimmel se encontraron frente a frente en el programa que conduce el presentador, Jimmy Kimmel Live.

 

El rapero lució apenado y aprovechó la oportunidad para pedir disculpas por los despectivos comentarios en su cuenta de Twitter luego de que Kimmel se burlara de su reciente entrevista a la cadena BBC.

 

Kanye aseguró que el enojo que lo impulsó a insultar al presentador fue principalmente originado por los problemas que arrastra en su vida personal, aunque remarcó que también se sintió traicionado tras haber mantenido una amistad entre ambos.

 

“Me considero un genio creativo. Sé que no está bien visto que uno diga este tipo de cosas de sí mismo y reconozco que muchas veces me equivoco con mis comentarios. Aunque pienso que la intención con la que hago las cosas, es la que cuenta”, se justificó el músico.

 

West explicó que su único objetivo en estos momentos es centrarse en su trabajo, con el fin de seguir creciendo como artista. Además habló de moda, derechos civiles y, por supuesto, de su novia, Kim Kardashian.

 

Otro a la lista

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Luego de sus presentaciones en Nueva Zelanda con el Diamonds World Tour, Rihanna decidió darse un regalito que le durará para toda la vida.

 

La cantante presumió la nueva obra de arte que porta en su piel, un tatuaje maorí tradicional en la mano derecha, para los cuales es conocido que se utiliza una técnica muy diferente a la convencional.

 

Los tatuadores introdujeron la tinta en la piel de RiRi a base de ¡un cincel y martillo!, lo cual, a pesar de que lució tranquila, seguramente causó mucho dolor a la cantante ya que tuvo que detener el proceso por un momento para secar la sangre que manaba de su brazo.

 

Rihanna quiso mostrar al mundo con un video de dos minutos subido a YouTube, parte de este “ritual” realizado en el estudio de tatuajes Mok Ink, reconocido por sus trabajos maorís.