Crisis, dicen, significa cambio. Y al llegar a los 50, Marc Jacobs apostó por los cambios drásticos en su vida. El primero, no renovar su contrato con la casa Louis Vuitton, firma que ha impulsado durante los últimos 16 años, para dedicarse a su propia firma. El segundo, romper su relación con el ex actor porno y modelo Harry Louis.
Multipremiado y admirado, Jacobs tiene una historia brillante en el mundo de la moda. Empezó trabajando como vendedor en una tienda de ropa, antes de graduarse en la prestigiosa escuela de diseño Parsons, desde la que consiguió impulsar una carrera que le ha permitido llevar a lo más alto el amor por la costura que le transmitió su abuela.
En 1997, Louis Vuitton creó el puesto de director creativo para él, y le encargó diseñar las primeras colecciones de prêt-à-porter para hombre y mujer de una casa reconocida por su trabajo del cuero en bolsos y maletas.
El modisto neoyorquino aceptó el desafío de actualizar y trasladar los códigos de una compañía fundada por Louis Vuitton, un pionero en la fabricación de equipajes del siglo XIX.
Desde entonces, Jacobs se convirtió en un nombre indisociable de Vuitton -hasta el momento de su renuncia y es casi como un segundo fundador que, sin embargo, se ve relegado a diseñar bajo el nombre de otro.
Por este motivo, el modisto ha decidido abandonar el nido en lo más alto de su carrera para dedicarse, en exclusiva, a forjar su propia historia.
Para despedirse como se debe, realizó un desfile el pasado 2 de octubre en el que reunió referencias de sus anteriores presentaciones.
Un tiovivo, unas escaleras mecánicas, unos ascensores de hierro forjado, las puertas de un hotel o un reloj de estación fueron algunos de los elementos que Jacobs quiso reunir sobre la pasarela para recordar el legado que ha transmitido a una marca que ha situado entre las más destacadas del prêt-à-porter.
Al término del espectáculo, la revista especializada en moda WWD (Women’s Wear Daily) fue la encargada de anunciar en su versión electrónica que el modisto abandonaba la famosa casa.
¿Qué sigue ahora para él? Hace 20 años que cocina una firma que fundó con su socio Robert Duffy y que ahora comparten con el grupo LVMH, a razón de un tercio cada uno.
En 2001 dio los primeros pasos su segunda línea, Marc by Marc Jacobs, más cercana al público, a la que seguiría Little Marc, en 2005, para vestir a los más pequeños, y los accesorios, desde calzado, hasta zapatos, joyas o sus reconocidos bolsos.
Ahora tiene previsto sacar a bolsa su compañía en los próximos tres años, por lo que ha decidido concentrarse en impulsar su vertiente comercial y creativa.
En cuanto a Louis Vuitton, el mundo de la moda sólo espera que se confirme uno de los nombres que más suenan en las quinielas, Nicolas Ghesquière, ex de Balenciaga, para el puesto de director creativo.
EL ROMPIMIENTO
Pero por si la despedida de Louis Vuitton no fuera suficiente, Marc Jacobs también decidió dar por terminada su relación con el modelo y ex actor porno brasileño Harry Louis, según reveló el portal del diario español ABC.
El propio Harry se encargó de dar a conocer la noticia en Instagram, con una foto y un comentario: “Me gustaría ser el primero en compartir con ustedes todas las noticias… Marc y yo hemos decidido no continuar con nuestra relación como novios… La distancia y la falta de tiempo debido a los horarios de trabajo no son realmente la causa, y él es una persona tan hermosa y sorprendente, que yo creo que se merece un novio que se quede por lo menos en una de las ciudades que deja”.
Y agregó, para todos aquellos que no tuvieran buenos sentimientos hacia la pareja: “Para aquellos que rezaban por este día, aquí lo tienen… Marc Jacobs y Harry Louis oficialmente ya no son pareja”. AGENCIAS