La carretera libre y autopista Monterrey-Laredo, en límites de Nuevo León y Tamaulipas, fueron cerradas a la circulación debido al desbordamiento del río Salado que provocó inundaciones en diversos tramos de estas vías, afectando algunos vehículos.
El director de Protección Civil del estado, Jorge Camacho Rincón, dio a conocer que la principal afectación se reporta a la altura del kilómetro 180, en ambas circulaciones, donde es imposible circular.
Explicó que el río Salado ya presentaba un alto volumen de casi un 80 por ciento, tras las recientes lluvias generadas en la entidad por la tormenta tropical Ingrid, por lo que algunos escurrimientos de la sierra del municipio de Anáhuac provocaron su desbordamiento.
Manifestó que ante la falta de visibilidad en la zona algunos automovilistas continuaron avanzando quedando varados a causa del alto nivel del agua en el sitio, sin que se reporten personas lesionadas.
Indicó que en el lugar ya se encuentran elementos de la Policía Federal de Caminos para orientar a las personas a tomar vías alternas para quienes se dirigen a Nuevo Laredo o a esta ciudad.
El funcionario estatal dijo desconocer en cuánto tiempo se reabrirá la circulación en la zona, ya que habrá que esperara que disminuya el nivel del río Salado.
Por su parte, la Policía Federal dio a conocer que en el kilómetro 195 de Nuevo Laredo a Monterrey está el entronque para tomar la carretera a Colombia y Miguel Alemán que los automovilistas pueden tomar para seguir su camino a Monterrey.
En tanto que en el lugar se formaron largas filas de vehículos particulares y de carga pesada que quedaron varados al llegar a los tramos afectados por el alto nivel del agua.