Hace 52 días, los integrantes de la Sección 22 de la CNTE paralizaron la educación en Oaxaca. Sólo hasta que negociaron con el gobierno federal 115 millones de pesos, el pago de sus sueldos y la permanencia en su trabajo, los docentes decidieron regresar a las aulas.

 

El esquema movilización-negociación no es nuevo, así ha sido desde hace 30 años, responde el gobernador Gabino Cué que, desde la sala de juntas en su despacho de la Casa del Pueblo atiende una apretada agenda de entrevistas con medios nacionales y locales con motivo del inicio de clases en la entidad.

 

Su rostro y manos permanecen poco se mueven cuando se le pregunta si acaso su gobierno cedió a las presiones.

 

“Así ha sido siempre. Cada mes de mayo hay un pliego petitorio. Año con año el SNTE presenta un pliego, se negocian los aumentos salarias y las negociaciones. Aquí es lo mismo y lamentablemente hay una doble negociación. Nosotros desde que llegamos no hemos dado un día (económico) directo al trabajador, todo lo que planteamos tiene que ver con las mejoras estructurales del gremio”.

 

Sobre las movilizaciones del magisterio como medio para obtener beneficios defiende la actuación de su gobierno: “Somos los primeros en contra de esas acciones. Lamentablemente así es su esquema. Yo tengo una buena relación con ellos y me dicen: a ver gobernador, nuestro esquema de lucha es movilización-negociación y así hemos funcionado durante 30 años”.

 

“No nos gusta, pero es una práctica. Aquí en Oaxaca hay una gran movilización social, no deja de haber manifestaciones. No es sólo movilizaciones, es una práctica”.

 

No obstante, el gobernador presume una relación diferente a la de sus predecesores con la Coordinadora.

 

“Tengo una relación completamente distinta, ahora se sientan a dialogar con el gobernador. No hay una relación de dádivas con los líderes, aquí no se les da dinero, aquí no se financia el traslado de los profesores. A diferencia del pasado nosotros decidimos no pagarles mientras no estén trabajando”, dice con prisa después de recibir una llamada que le avisa que una estación de radio lo espera para una entrevista.

 

En los encuentros con Segob, el gobierno local aceptó pagar sus sueldos, así como revisar y arrancar un programa piloto del plan de estudios alternos de la Sección 22, y no aplicar la Ley General del Servicio Profesional Docente que establece el despido del personal que falte tres días consecutivos.

 

-¿Veremos un nuevo paro de labores o ahora si habrá aplicación de la ley?

 

-Durante 33 años ha habido paro de labores, esto no es nuevo. En 2006 estuvieron cuatro meses parados. Es un tema complejo que se tiene que ir resolviendo con mucho diálogo, con muchas reuniones de trabajo.

 

Sin titubeos, Cué adelanta el final de su sexenio: mejorar las condiciones de infraestructura y educación en el territorio oaxaqueño. Pero en el tema de la Sección 22, las cosas no van a cambiar “hasta que existan las condiciones para que ocurra”, pero no sabe cuándo podrá pasar porque así ha sido desde hace más de 30 años.