Estados Unidos salió hoy al paso de nuevas revelaciones de espionaje de la NSA sobre gobiernos como el de Francia o México y expresó su expectativa de que los incidentes no afecten negativamente sus relaciones bilaterales.
La portavoz del Departamento de Estado, Marie Harf, señaló que la administración Obama toma “seriamente” las preocupaciones de los gobiernos, pero insistió que Estados Unidos recopila información de inteligencia al igual que otros países.
“La información de inteligencia no es sólo es acopiada por los Estados Unidos sino por todos los países y también compartimos información”, señaló.
Harf declinó hablar de casos específicos, pero refrendó que la administración Obama discutirá en privado a través de “canales diplomáticos” el tema con todos los países que externen su preocupación.
El semanario alemán Spiegel reportó este fin de semana que la NSA (Agencia de Seguridad Nacional) penetró el sistema de correos del entonces presidente mexicano Felipe Calderón (2006-2012), lo que motivó una condena por parte del gobierno mexicano.
“Esta práctica es inaceptable, ilegítima y contraria al derecho mexicano y al derecho internacional”, señaló la cancillería mexicana.
Por separado, el diario francés Le Monde reportó que sólo en un mes la NSA había recolectado más de 70 millones de comunicaciones, del 10 de diciembre del 2012 al 8 de enero de 2013, lo que motivó una airada reacción del gobierno galo.
Las nuevas revelaciones están contenidas en documentos obtenidos por el excontratista de la NSA Edward Snowden.
Cuestionada por un reportero sobre la molestia expresada por gobiernos como los de Francia, México, Brasil y Alemania, Harf dijo que la meta de Estados Unidos es buscar un “balance” entre las necesidades de inteligencia, la privacidad y las preocupaciones de otros países.
“Pensamos que estos son asuntos importantes sobre los cuales conversar y no queremos que estos presuntos reportes en la prensa influyan negativamente en nuestras relaciones bilaterales”, insistió.
Harf sostuvo que sus declaraciones no deber ser interpretadas como una confirmación sobre el contenido de los reportes periodísticos.
“Las actividades de inteligencia son clasificadas y los detalles son clasificados por alguna razón”, enfatizó.