Alemania y Brasil presentarán la próxima semana un primer borrador de resolución para que la Asamblea General de la ONU se pronuncie en contra del espionaje y en defensa de la protección a la privacidad y las comunicaciones.

 

Así lo confirmaron fuentes diplomáticas occidentales, que explicaron que las primeras conversaciones empezaron unos meses atrás, cuando saltó el escándalo que tiene en el punto de mira a los servicios de inteligencia de Estados Unidos.

 

Berlín y Brasilia circularán “antes del 1 de noviembre” un primer borrador de resolución entre el resto de los Estados miembros, con la idea de que la tercera comisión de la Asamblea General lo apruebe “antes del Día de Acción de Gracias” (el 28 de noviembre).

 

Posteriormente, el texto pasaría al pleno de la Asamblea General para que sea sometido a votación y eventualmente adoptado, un proceso que esperan que concluya “antes de Navidad”, según las mismas fuentes.

 

En la resolución se quiere hacer mención al artículo 17 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos que establece que “nadie será objeto de injerencias arbitrarias o ilegales en su vida privada, su familia, su domicilio o su correspondencia”.

 

El jueves se celebró un encuentro en el que participaron varios embajadores europeos y latinoamericanos para continuar preparando el borrador del texto y la próxima semana continuarán las reuniones, según las fuentes consultadas.

 

La magnitud del espionaje de Estados Unidos a sus ciudadanos y a los Gobiernos extranjeros salió a la luz hace unos meses a través de algunos de los documentos filtrados a la prensa por el exanalista de la CIA Edward Snowden.

 

Esas revelaciones han elevado las críticas de países como Brasil y México y más recientemente de líderes europeos como la canciller alemana, Angela Merkel, mientras el diario británico The Guardian reveló ayer que Estados Unidos llegó a espiar a 35 mandatarios mundiales.

 

La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, reiteró esta semana su propuesta de adoptar en la ONU un marco global para proteger la privacidad en internet, la cual, dijo, no debe ser vulnerada en nombre de la lucha contra el terrorismo.

 

Merkel, por su parte, dijo este jueves que “no es aceptable en absoluto el espionaje entre amigos y aliados”, en una conversación con el presidente de Estados Unidos, Barak Obama, tras las sospechas de que ese país interceptó durante años su teléfono celular.

 

La Casa Blanca ya ha comenzado a adoptar medidas para examinar las recomendaciones de organizaciones de derechos civiles y está examinando cambios para garantizar el equilibrio entre privacidad y seguridad.