La amenaza que representaba el socialismo en América para los Estados Unidos durante la Guerra Fría, dejó aislada a una nación por más de medio siglo. Hoy Cuba se reforma a pasos agigantados para llegar a una cita con la que Occidente tampoco tiene certeza. Este martes se decidirá, una vez más, el bloqueo que mantiene EU sobre país del son y el ron al interior del Consejo de Seguridad de la ONU.
En el ámbito exterior, la isla refuerza sus alianzas con gobiernos socialistas como China, Korea del Norte, Venezuela, y estrecha lazos con países estratégicos como Brasil, Siria, Irán y los renueva con México.
Pero los cambios sociales que enfrenta el gobierno de Raúl Castro, luego de que anunciara el pasado 24 de febrero que no contendería en las próximas elecciones, han traído consigo las transformaciones que apuntan a un nuevo modelo económico-social en la isla y dejan atrás medidas que pervivieron durante 60 años.
Desde que el hermano de Fidel Castro asumió definitivamente la presidencia, en febrero de 2008, se dieron las primeras reformas. Ese marzo levantó la prohibición que impedía a los cubanos alojarse en hoteles de la isla, exclusivos para turistas.
A esta medida siguió la venta libre de electrodomésticos, ordenadores y teléfonos móviles.
A lo largo de 2009 se reformó la Ley de Seguridad Social, se elevó la edad de jubilación a 60 años para las mujeres y 65 años para los hombres, se eliminó el tope salarial y se autorizó el pluriempleo.
Ese mismo año, el gobierno permitió a la población cubana acceder a internet, aunque todavía restringida al grueso de la población, donde el salario promedio era de 15 dólares y el costo de navegación por hora llega a los 4.50 dólares o pesos cubanos convertibles (CUC).
También, en agosto de 2010, Raúl Castro anunció aunque con retrasos, la reducción progresiva de las plantillas estatales y la ampliación del trabajo por cuenta propia. Y un mes después entró en vigor la reforma laboral quepuso fin al “igualitarismo” salarial.
A finales de 2011 el gobierno de Cuba renunció a su monopolio comercial agrícola, al autorizar que tambiéncooperativas y empresas estatales vendan sus productos en forma directa a hoteles y otras instalaciones.
Así mismo otros sectores como los servicios gastronómicos, la construcción de materiales de vivienda, el sector artístico, de transporte, artesanos, pescadores y comercialización de alimentos agrícolas son evaluados para que formen parte del sistema de cooperativas.
La cooperativa es, junto a la propiedad estatal, una de las dos formas de propiedad socialista.
Pero la carta fuerte con la que se presenta en la próxima reunión de Naciones Unidas, este martes 29 de octubre, relativa al bloqueo que mantiene EU a la isla, será la pasada reforma migratoria del 14 de enero que eliminó las restricciones para salir al extranjero; ahora sólo se exige la presentación del pasaporte corriente actualizado y la visa del país de destino para viajar al exterior.
También se ha normalizado la “entrada temporal” en la isla de los emigrados que consideraba “ilegales”, incluidos médicos y deportistas que desertaron o abandonaron el país en los años noventa, dentro de la actualización de la reforma a la política migratoria.
Y similar a lo que acontece en México, con el apagón analógico, La Habana inició en junio las pruebas de la televisión digital con tecnología china para introducir de manera progresiva este servicio en el país.
Por último, el gobierno cubano anunció hace cinco días el inicio del proceso de modificación para eliminar el sistema de doble divisa que circula en el país, por el que ciudadanos locales y extranjeros se manejan con distintos tipos de cambio desde hace 19 años. Esto a fin de restablecer el “valor del peso cubano y de sus funciones como dinero”, informó el presidente.
El peso nacional se encuentra a una paridad de 24 a uno respecto a la otra moneda circulante, el peso cubano convertible (CUC) no sometida a fluctuaciones.
Los empleados públicos reciben en sus salarios para pagar por algunos productos y servicios básicos en el primero, y con el CUC, equivalente al dólar, el Estado vende los productos importados y cobra por servicios como el turismo. Este sistema ha sido un reclamo de la sociedad cubana que recibe su salario en pesos nacionales, pero debe comprar aceite o pasta de dientes en CUC.