BUENOS AIRES. La presidenta Cristina Fernández de Kirchner inicia la última etapa de su segundo gobierno que termina en 2015, con el poder acotado, tras ser derrotada en los mayores distritos en las legislativas del domingo, aunque conserva la mayoría en el Congreso.
El opositor Sergio Massa, de 41 años, exjefe de gabinete de Kirchner, fue no obstante el gran ganador de la elección del domingo, al sumar casi 3.8 millones sólo en la provincia de Buenos Aires, 43.93%, el distrito que nuclea 40% del padrón nacional de 30 millones de electores.
En tanto, en los ocho distritos en los que se eligieron senadores, el gobierno conservó las 11 bancas que ponía en juego en la Cámara alta, donde forma mayoría con tres partidos provinciales.
La mandataria perdió una parte del caudal de 11 millones de votos con los que fue reelegida en 2011 con el 54%, pero tiene enfrente varias fuerzas de oposición, en carrera hacia las presidenciales de 2015.
Las elecciones legislativas dibujaron un nuevo mapa político en el país y supusieron el inicio hacia la carrera presidencial para 2015.
Massa se puso en la línea de largada en una carrera presidencial en la que ya se anotaron el peronista Daniel Scioli, gobernador de la provincia de Buenos Aires y aliado de Kirchner, aparece como un candidato natural.
Favorito de los medios de comunicación opositores, Sergio Massa anunció que ahora comenzará a recorrer el país para ampliar su base y construir una alternativa política al gobierno actual, que se basa en el FPV, coalición que reúne al Partido Justicialista y a formaciones de izquierda.
También el alcalde capitalino, el derechista Mauricio Macri, cuyo partido Propuesta Republicana (Pro) volvió a imponerse en su distrito con 34.46% de los votos, oficializó su candidatura presidencial con el compromiso de “romper paradigmas e innovar en algo distinto”.
“Hace seis años que gobernamos el distrito más complejo de Argentina, con el gobierno nacional en contra, y lo hemos hecho bien, con transformaciones que mejoraron la vida de la gente. Creemos que podemos hacer esto en todo el país”, aseguró el dirigente conservador para defender su candidatura presidencial.
¿Y Cristina?
El silencio de la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, sobre el revés sufrido por el oficialismo en las elecciones legislativas desató especulaciones sobre la posibilidad de que no regrese al poder, rechazada ayer por miembros del Gobierno y allegados políticos.
El ministro de Defensa, Agustín Rossi, consideró “temerarias” esas versiones y aseveró a una radio que la presidenta “está recuperándose y va a volver a reintegrarse sin ningún tipo de inconveniente cuando termine el periodo de recuperación” de la operación a la que se sometió el pasado 8 de octubre.
Fernández de Kirchner, que debe guardar 30 días de reposo por orden de los médicos, fue la gran ausente de las elecciones.
Poco se sabe de cómo vivió la Presidenta, de 60 años, la jornada electoral y la derrota de su partido, el Frente para la Victoria (Fpv), en los cinco principales distritos del país, entre ellos la provincia de Buenos Aires.
Sin embargo, algunos medios locales, como el diario La Nación, apuntan a que la mandataria dirigió desde su retiro el evento organizado por el oficialismo en un hotel de la capital, en el que se destacó la victoria a nivel nacional de FpV con el 33.1% en la Cámara de Diputados y el 32.1% en el Senado.
Ningún referente del oficialismo se ha atrevido a aventurar cuándo reaparecerá Fernández de Kirchner, ni siquiera su hijo Máximo, quien aseguró a la prensa, que su madre “mejora”, pero que su vuelta “es una decisión de los médicos”.
Si se cumplen los plazos previstos, la jefa de Estado reanudará sus actividades hacia mediados de noviembre, aunque, de acuerdo con las orientaciones de los médicos, probablemente tendrá que ajustar su agenda oficial, al menos durante las primeras semanas.
No prevén cambio de rumbo económico tras comicios
Para los expertos, el Ejecutivo podría hacer cambios en el equipo económico, pero ello no supondrá un giro radical en la marcha de la economía, que seguirá creciendo a un ritmo moderado, pero con alta inflación. La actividad económica de Argentina creció el 1.9 % en 2012. Según los últimos datos oficiales disponibles, en los primeros ocho meses de este año la actividad económica argentina acumuló un alza interanual del 5.5 %, rebote que está lejos de la tasa de expansión promedio del 8.3 % anual registrada entre 2003 y 2011.
De movida, un día después de la elección, el Gobierno flexibilizó hoy el ingreso de dólares al país para invertir en bienes de capital y pagar impuestos. El Gobierno prevé que este año la inflación será del 11,2 %, pero para analistas privados los precios crecen en realidad a un ritmo del 25 % anual.