SAN FRANCISCO. Dell Inc. salió ayer del Nasdaq. La compañía sacó sus acciones de la plataforma electrónica de cotizaciones después de que el fundador Michael Dell y la firma de capital privado Silver Lake completaran su controvertida compra por 24 mil 900 millones de dólares.

 

“Hoy, Dell entra en un emocionante nuevo capítulo como empresa privada”, comentó el presidente ejecutivo de la compañía, Michael Dell.

 

La adquisición, a la que se opusieron grandes accionistas de la compañía, como Carl Icahn, que exigió un precio mayor, fue finalmente aprobada con un precio de 13,75 dólares por acción, más un dividendo especial de 13 centavos de dólar.

 

La operación fue autorizada desde el 13 de septiembre y pone fin a un historial de cotización de 25 años en Nasdaq, en un intento de su fundador por revivirla, después de que los embates de la era Post-PC.

 

Al igual que sus rivales, Dell fue golpeada por la rapidez del declive en ventas de computadoras personales a nivel global en los últimos años, debido a que los consumidores prefieren cada vez más gastar en poderosos smartphones y tablets ultraligeras.

 

La compañía, que por un breve período en la década pasada fue el mayor fabricante mundial de computadoras personales, ha visto el desplome de sus acciones desde un máximo de 50 dólares por papel en el 2000, su época de mayor apogeo.

 

Dell Inc. fue iniciada como la mayoría de las grandes corporaciones tecnológicas actuales, en el dormitorio de Michael Dell. Siendo un universitario, en 1984, la convirtió en un modelo de producción de computadores y administración de cadena de suministros, que fue digna de imitaciones, ahora Dell intenta transformarla en un proveedor de servicios de computación para corporaciones.

 

Dell cree que una reformulación tan radical se hará mejor sin el escrutinio de los mercados públicos y que esta compra es el primer paso en una transformación de varios años que devolverá a Dell Inc. a sus raíces y se centrará en el “espíritu empresarial” con el que fue fundada la empresa.

 

“Los 110 mil miembros de nuestro equipo en todo el mundo están 100% enfocados en nuestros clientes y están ejecutando agresivamente nuestra estrategia a largo plazo para su beneficio”, añadió.

 

El mes pasado, Dell Inc. informó que sus ganancias bajaron 77% en el último trimestre fiscal, al reducir precios la empresa para compensar la contracción de sus ventas.

 

Las acciones de Dell han bajado más del 40% desde que Michael Dell regresó para un segundo periodo como director general en 2007.

 

Michael Dell, quien formuló su oferta con el grupo inversionista Silver Lake Partners, reconoció que la reforma seguramente reducirá sus beneficios por otros dos años, por lo que será más fácil lograrla sin la atención de Wall Street, obsesionada con los resultados a corto plazo.