El indulto a Alberto Patishtán, anunciado ayer por el presidente Enrique Peña Nieto, evidencia las fallas del sistema judicial en México, acusaron los abogados del profesor tzotzil, Sandino y Leonel Rivero, y el representante de Amnistía Internacional en México, Daniel Pizaco.

 

El Ejecutivo vino a enmendar un claro error del poder judicial, lo que deja ver que no está funcionando, dijeron.

 

En conferencia de prensa, Miguel Álvarez, de Servicios y Asesoría para la Paz A.C (Serapaz), detalló que Patishtán es atendido medicamente en la Ciudad de México aunque en calidad de preso, pero mañana podría ofrecer una conferencia luego de ser liberado tras 13 años de permanecer preso.

 

De acuerdo con el blog de Patishtán, el encuentro con los medios será en Casa de la Solidaridad en Patricio Sánz, número 449, colonia Del Valle, aunque la hora está por confirmarse.

 

Ayer por la noche el presidente Enrique Peña Nieto anunció que el jueves las Reformas al Código Penal Federal en materia de indulto aprobadas por el Congreso de la Unión entrarán en vigor, por lo que hará uso de esa atribución para otorgar el indulto a Alberto Patishtán.

 

En su cuenta de twitter el mandatario escribió: “Este mismo jueves, la Reforma entrará en vigor e indultaré a Alberto Patishtán Gómez”.

 

Patishtán Gómez, un maestro indígena bilingüe, se encuentra preso desde hace 13 años, acusado de homicidio y lesiones calificadas, daños en propiedad ajena y porte ilegal de armas de fuego.

 

Se le señala como responsable de emboscar y matar él solo a siete policías estatales que iban a bordo de una patrulla en un paraje del sudoriental estado de Chiapas en junio de 2000, por lo que fue sentenciado a 60 años de cárcel.

 

A mediados del pasado mes de agosto, Amnistía Internacional consideró injusta su sentencia y encontró irregularidades en el proceso.

 

Terminó larga cadena de injusticias: hija

 

De acuerdo con la hija del Patishtán, Gabriela, la reforma al código penal aprobada por el Congreso de la Unión pone fin a una larga cadena de injusticias cometidas en contra su padre.

 

La indígena dijo que su padre está emocionado porque ahora sí recobrará su libertad que perdió desde hace 13 años tras haber sido acusado de participar en una emboscada en el municipio de El Bosque, en la que perecieron siete policías estatales.

 

“Indudablemente que estamos emocionados con mi papá, son 13 años de grandes luchas constantes, de vivir obstáculo tras obstáculo, pero al fin hemos logrado el objetivo de nuestra lucha, la lucha de la familia, de las organizaciones que nos han apoyado”, agregó.

 

Refirió que por la tarde verá a su padre en el Instituto Nacional de Neurología, en la Ciudad de México, donde hace casi un mes recibe un tratamiento de 29 sesiones de radiología que le fueron programadas para atacar el tumor que nuevamente le ha vuelto a crecer en la cabeza.

 

Gabriela comentó que hasta el momento no ha platicado formalmente con su padre a qué se dedicará cuando salga, pero ella cree que retomará su carrera de maestro indígena.

 

“No lo hemos platicado este tema, pero creo que seguirá en la lucha por los derechos humanos y también estoy segura que volverá a dedicarse a su profesión, a lo que era antes, él ama esta carrera de enseñar a los niños”, expresó.

 

Asimismo, explicó que ella estudia actualmente la carrera de abogada en la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Chiapas y dijo que decidió estudiar la carrera para dedicarse a la defensa de quienes son detenidos injustamente.

 

“Me inspiró el poder ayudar a otras personas que han sufrido el mismo caso de mi papá, de haber sido sentenciado injustamente; yo también quiero aportar algo que sufren lo mismo que mi papá”, concluyó antes de partir hacia la ciudad de México para convivir con su padre. (Notimex)