El pleno de la Cámara de Diputados discutirá mañana un punto de acuerdo para solicitar informes sobre la cancelación de la construcción de la refinería de Petróleos Mexicanos (Pemex) en Tula, Hidalgo.
Por acuerdo de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) se solicitará a Pemex entregue la información requerida para conocer “qué sucedió para cancelar este megaproyecto”, así lo expresó su presidente, Silvano Aureoles.
La paraestatal en su Plan de Negocios 2014-2018, descartó contemplar la construcción de la nueva refinería de Tula, Hidalgo, construcción anunciada en la pasada administración federal, presidida por Felipe Calderón.
El plan fue presentado y avalado por el Consejo de Administración que dirige el secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, y sienta las bases del trabajo que realizará la empresa para los próximos cinco años.
El documento emitido por la paraestatal argumenta que con o sin reforma energética, se descarta la construcción del complejo valuado en 10 mil millones de dólares, por recursos limitados y asignación a proyectos más rentables.
La construcción de la refinería fue uno de los proyectos de inversión más ambiciosos del gobierno de Felipe Calderón, quien en el 70 aniversario de la expropiación petrolera del 18 de marzo del 2008, dijo que el complejo petroquímico sería parte de una estrategia para enfrentar la crisis mundial de energéticos y anunció un presupuesto inicial de 12 mil millones de dólares.
En el 2009 se informó que la refinería de Petróleos Mexicanos se construiría en Tula, aunque se condicionó a que el gobierno de Hidalgo entregara, en un plazo no mayor a 100 días completamente liberadas un total de 700 hectáreas.
El entonces director general de Pemex, Jesús Reyes Heroles, advirtió que de no ser Tula Hidalgo, la segunda opción sería Salamanca en Guanajuato.