MÉXICO. La Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) coincidió en que la economía mexicana seguirá recuperándose, aunque prevalecen riesgos tanto externos como internos, entre ellos el deterioro del sector de la construcción.

 

De acuerdo con la minuta con motivo de la decisión de política monetaria anunciada el 25 de octubre pasado, los integrantes de la Junta señalan que hay indicadores que muestran una mejoría en la demanda interna y externa.

 

Sin embargo, “algunos miembros sostuvieron que no se observan indicios claros de fortalecimiento del consumo ni de la inversión, la cual ha continuado mostrando signos de debilidad principalmente debido a la fuerte contracción del sector de la construcción y, en particular, del sector de vivienda”.

 

De hecho, uno de los miembros precisó que el persistente deterioro que ha presentado el sector de la construcción en el país es un riesgo adicional para el crecimiento.

 

Hace unos días, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) indicó que el declive que registra el sector de la construcción de vivienda podría prolongarse, pues no se espera un repunte en los siguientes dos o tres trimestres.

 

Otro de los riesgos a la baja para las previsiones de crecimiento del país que advirtió la Junta de Gobierno del Banxico fue que el proceso de reformas estructurales actualmente en discusión en el Congreso pudieran tener un alcance menor al anticipado por los agentes económicos.

 

La mayoría previó un posible debilitamiento de la economía de Estados Unidos, así como la posibilidad de episodios de turbulencia en los mercados financieros internacionales asociados al manejo de las políticas monetaria y fiscal en ese país.

 

Para la mayoría de los miembros de la Junta “prevalecen elevados riesgos a la baja para las previsiones de crecimiento de México, si bien menores que en la reunión anterior”.

 

Pese a ello, la Junta de Gobierno del Banxico expone que se anticipa que la economía mexicana continúe mostrando una recuperación en lo que resta del año y durante 2014, debido que se espera un mayor impulso proveniente del crecimiento estadunidense, así como por las bajas tasas de interés.

 

No obstante, aclara, la recuperación de México “dependerá de manera más fundamental de que se reactive la inversión privada, aumente la productividad y se creen más empleos, lo cual en buena medida podría ser resultado de las expectativas más favorables sobre el futuro de la economía mexicana que podría traer consigo el proceso de reformas estructurales”.

 

Por otra parte, la Junta de Gobierno reitera que la inflación muestra un desempeño favorable en un entorno de una pronunciada desaceleración de la economía mexicana y que se anticipa que prevalezcan condiciones de holgura por un tiempo prolongado, aunque reduciéndose en el horizonte en que opera la política monetaria.

 

Los integrantes de la Junta descartan presiones generalizadas sobre la inflación en el futuro próximo y prevén en que la reforma fiscal tenga un efecto moderado y temporal.