NUEVA YORK. La cadena de comida rápida McDonald’s pidió a los dueños de sus franquicias que cabildeen entre miembros del Congreso de Estados Unidos con el fin de que se discuta este año la reforma migratoria, informó hoy The Wall Street Journal (WSJ).

 

El diario indicó que, según dos personas enteradas de los planes de la compañía, McDonald’s comenzó el esfuerzo luego de una reunión con el presidente estadunidense Barack Obama en que participaron varios líderes de empresas.

 

El esfuerzo es uno de los intentos para que los republicanos en la Cámara de Representantes accedan a discutir una iniciativa migratoria antes de que termine este periodo legislativo en el Congreso, lo que parece cada vez menos probable.

 

En el empuje participan además líderes religiosos, entre quienes destaca el cardenal de la Arquidiócesis de Nueva York, Timothy Dolan, quien la semana pasada envió una carta al líder republicano en la Cámara de Representantes, John Boehner, para que considere la reforma “lo antes posible”.

 

Mientras tanto, grupos civiles se concentran en ejercer presión contra legisladores específicos que se han manifestado en contra de la iniciativa de ley con el fin de persuadirlos para que la apoyen.

 

La coalición de grupos Neoyorquinos por una Reforma Migratoria Real organiza una campaña en que participan más de 170 personas en un ayuno y una vigilia de tres días frente a la casa del legislador republicano Michael Grimm, en el condado de Staten Island.

 

La vigilia y el ayuno forman parte de un esfuerzo nacional llamado “Ayuno por las familias” que reúne a docenas de personas en la capital estadunidense que pugnan porque se discute este año la reforma migratoria en la Cámara de Representantes.