La Procuraduría General de la República (PGR) advirtió que es necesario eliminar los “malos hábitos” y las “inercias que obstaculizan” en el país la transición a un sistema penal moderno.
La subprocuradora Jurídica de la PGR, Mariana Benítez Tiburcio, dijo que todos los actores y operadores del sistema penal, es decir, procuradurías, policías, sistemas judiciales y sociedad civil, tienen que mostrar compromiso y voluntad para que el cambio a los juicios orales y sistema acusatorio ocurra de forma adecuada.
“Más allá de las leyes que se puedan modificar y de los cambios institucionales que podamos lograr, necesitamos iniciar una transformación cultural profunda entre operadores, autoridades y sociedad en general; si logramos sustituir las malas prácticas, los malos hábitos, las inercias que obstaculizan y detienen esta transición, habremos dado un gran paso en esta transición al nuevo sistema”, señaló la subprocuradora.
Benítez recordó que la modernización del sistema penal en México responde a las demandas legítimas por contar con un proceso más equilibrado, en el que se respeten los derechos humanos y las garantías de las víctimas e inculpados, y al mismo tiempo se garantice una efectiva sanción a los responsables de un delito.
Reconoció que es un proceso que no es sencillo. En otros países que ya vivieron su transición, se han presentado obstáculos como dependencia excesiva de cambios legislativos, la distancia que existe entre la letra de la ley y la realidad social, las resistencias institucionales al cambio, la deficiencia en la creación de sistemas de profesionalización de jueces, fiscales, investigadores, entre otros.
Por ello sostuvo que es importante poner “el mayor empeño” para que el cambio en México ocurra de la mejor forma posible, lo que no se logrará si el esfuerzo no es parejo.
La subprocuradora comentó lo anterior al participar en la inauguración del Congreso Internacional de Derecho Procesal Penal en la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca (UABJO).