Por ejemplo: Que un político mandamás del Partido Acción Nacional (PAN) decidió vetar a una posible candidata a Consejera Electoral para el  Instituto Federal Electoral (IFE) porque se está divorciando de ella y ‘habría que castigarla’, a pesar de sus calificaciones y experiencia.

 

Que un Consejero Electoral ya en funciones en el IFE del que se publicó que apoya a un candidato a Consejero por el PRD y tiene a la esposa de éste trabajando en sus oficinas, quiso moverla de la posición para evitar ‘balconeos’, pero la señora resultó respondona y luego…  tal-y tal-y tal…

 

Parece mentira, pero subsisten en México aquellas viejas e históricas manías tan dañinas siempre: las de las cuotas de poder para quienes están en el poder…

 

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