Veinte años duraron las negociaciones entre México y Estados Unidos para llegar a un acuerdo para la construcción de un puente peatonal transfronterizo que conectará San Diego con el Aeropuerto Internacional de Tijuana.
“Este es un proyecto que tiene más de 20 años que queremos desarrollar, inclusive antes de que nosotros estuviéramos como concesionario porque nosotros tenemos 14 años como concesionario del aeropuerto de Tijuana”, dijo a 24 HORAS Miguel Aliaga, director de Relaciones Públicas del Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAP).
Como informó este diario el pasado 19 de noviembre, inversionistas mexicanos y estadunidenses tienen listo un plan para construir una terminal aérea en Estados Unidos, en donde podrán esperar los estadunidenses su turno para cruzar la frontera a pie, hasta las pistas del aeropuerto mexicano.
La conexión entre el Aeropuerto Internacional de Tijuana con una terminal en Otay Mesa en Estados Unidos, forma parte de un acuerdo que los gobiernos de México y Estados Unidos lograron para resolver los problemas de saturación del aeropuerto de San Diego, el cual cuenta con una sola pista.
Aliaga señaló que el proceso de negociación para este nuevo puente peatonal transfronterizo fue largo. Culminó en agosto de 2010, cuando el Departamento de Estado con el visto bueno del Presidente de Estados Unidos, se aprobó el proyecto de su lado de la frontera.
Del lado mexicano, explicó, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes de México otorgó el permiso a GAP en 2012.
No obstante, apenas se iniciaron las obras del lado mexicano en julio pasado, cuando GAP comenzó la remodelación del Aeropuerto Internacional de Tijuana, pero del lado americano, la construcción de la nueva terminal podría empezar hasta principios del 2014.
“La construcción ya está hecha. Nosotros estuvimos la semana pasada en Tijuana en un pequeño evento en el que mostramos en una maqueta lo que nos haya hecho la constructora o el proyectista porque la obra ya se inició en julio. Ya se comenzó a construir la obra del lado mexicano.
“Del lado americano, no sé exactamente los tiempos que ellos lleven, pero ellos ya estarán haciendo alguna obra pronto con la idea de que nosotros terminaremos durante el segundo semestre del año que entra la obra y tenemos el estimado que el puente va estar funcionando para inicios del 2015”, explicó.
GAP invertirá 180 millones de pesos para realizar las obras del lado mexicano, pero la inversión total para el proyecto está valuada en 80 millones de dólares.
En una entrevista con 24 HORAS en febrero pasado, Eduardo Sánchez Navarro Redo, presidente del consejo de administración del GAP afirmó que el grupo estaba interesado en construir un aeropuerto alterno a la Ciudad de México.
Cuestionado al respecto, Miguel Aliaga comentó que el interés del grupo sigue presente.
“Hay que esperar todavía cuál será la decisión final del gobierno federal sobre el tema”, dijo.