El Vaticano expuso hoy en público, por primera vez en la historia, los restos que según la tradición pertenecen al apostol San Pedro, durante una misa multitudinaria encabezada por el Papa Francisco.

 

La caja de bronce de 30 centímetros, que contiene los fragmentos de huesos, permaneció abierta durante toda la celebración y tras la lectura del evangelio el pontífice la sostuvo en brazos en señal de adoración.

 

Los restos, encontrados en la tumba de Pedro descubierta bajo el altar mayor de la Basílica Vaticana en la década de 1940, fueron ofrecidos al Papa Pablo VI en 1971 y desde entonces conservados en la capilla del apartamento papal.

 

Nunca antes habían sido expuestos y Jorge Mario Bergoglio

El Vaticano expuso hoy en público, por primera vez en la historia, los restos que según la tradición pertenecen al apostol San Pedro, durante una misa multitudinaria encabezada por el Papa Francisco.

 

La caja de bronce de 30 centímetros, que contiene los fragmentos de huesos, permaneció abierta durante toda la celebración y tras la lectura del evangelio el pontífice la sostuvo en brazos en señal de adoración.

 

Los restos, encontrados en la tumba de Pedro descubierta bajo el altar mayor de la Basílica Vaticana en la década de 1940, fueron ofrecidos al Papa Pablo VI en 1971 y desde entonces conservados en la capilla del apartamento papal.

 

Nunca antes habían sido expuestos y Jorge Mario Bergoglio dio la autorización de exponerlos con motivo de la clausura del Año de la Fe, con la misa de este domingo a la Plaza de San Pedro, a la cual asistieron decenas de miles de personas no obstante la lluvia.

 

“La solemnidad de Cristo Rey del universo, marca también la conclusión del Año de la Fe convocado por el Papa Benedicto XVI, al cual va ahora nuestro pensamiento lleno de afecto y reconocimiento por este don que nos ha dado”, dijo el Papa en el sermón.

 

Desde el atrio de la Basílica de San Pedro calificó de “providencial iniciativa” que ha permitido a los católicos redescubrir la belleza del camino de fe.

, con la misa de este domingo a la Plaza de San Pedro, a la cual asistieron decenas de miles de personas no obstante la lluvia.

 

“La solemnidad de Cristo Rey del universo, marca también la conclusión del Año de la Fe convocado por el Papa Benedicto XVI, al cual va ahora nuestro pensamiento lleno de afecto y reconocimiento por este don que nos ha dado”, dijo el Papa en el sermón.

 

Desde el atrio de la Basílica de San Pedro calificó de “providencial iniciativa” que ha permitido a los católicos redescubrir la belleza del camino de fe.