Brasil podría dejar de ser el consentido para las inversiones italianas en América Latina, ya que México ha cambiado su imagen de país violento, rural y turístico a nivel internacional, lo que impulsó la economía nacional ante esa nación europea.
“Nosotros hemos tenido un fuerte enamoramiento con Brasil por la idea de que es un país que ya conocemos y donde hay una gran comunidad italiana residente. Este enamoramiento ha hecho que no se han evaluado las condiciones porque Brasil es un país mucho más cerrado que México. En Brasil ha habido una gran carrera (para que las empresas vayan a invertir allá). Me parece que esto ahora en Italia se está enfriando un poco y está comenzando una moda hacia México”, dijo a 24 HORAS Alberico Peyron, presidente de la Cámara Italiana en México.
La atracción y el interés de Italia por México han hecho que en los últimos años las empresas italianas empezaron a invertir y establecerse cada vez más en el territorio mexicano, pero las reformas que está realizando el gobierno de Enrique Peña Nieto ha puesto a este país en los reflectores del mundo.
Peyron recordó que hoy en día son 300 las empresas italianas establecidas en México o mil 400 negocios con capital italiano en el país si se consideran las inversiones en el sector restaurantero y hotelero, las cuales facturan un total de 10 mil millones de dólares.
En ese sentido, el nuevo embajador de la nación europea en este país, Alessandro Busacca, afirmó a 24 HORAS que su mandato será dedicado principalmente en ampliar y fortalecer el comercio entre México e Italia.
“Hay un potencial que puede ser desarrollado en este momento. Vamos a trabajar juntos con los amigos mexicanos, con el gobierno mexicano, con los empresarios, con la sociedad civil y las universidades para desarrollar más esta relación”, dijo el diplomático.
“Italia y México comparten muchos valores, los italianos y los mexicanos nos entendemos muy bien, gracias también al carácter latín en común, al hecho que ambos país somos estados jóvenes y pueblos antiguos y a la ausencia de conflictos en el pasado o de temas incómodos en el presente”, agregó.
El embajador confesó que la balanza comercial entre ambos países favorece más a Italia que a México, pues su nación exporta cinco mil millones de dólares a México e importa sólo 600 millones de dólares en productos mexicanos, por lo que consideró que es necesario buscar un mayor equilibrio e integración económica.
Actualmente Italia es un importante proveedor de tecnología para la industria mexicana, así como productos plásticos, químicos y bienes y servicios como muebles, ropa y alimentos, mientras que México le exporta específicamente petróleo, trigo duro y automóviles.
“Italia le vende tecnología para que México sea más productivo y más competitivo”, explicó Alberico Peyron.
Tanto el embajador como el presidente de la Cámara de comercio italiana coincidieron en que las reformas estructurales que realiza el gobierno mexicano impulsarán el comercio y las inversiones en el país.
La reforma que atrae particularmente la atención de Italia es la energética, aunque todavía no está claro el impacto que tendrá para las posibilidades de negocios, estimó el embajador Busacca.
“Tenemos empresas en Italia que están siguiendo el proceso, en telecomunicaciones también. Necesitamos ver las leyes secundarias. Hay mucha atención en todo el sector energético porque tenemos muchas empresas que pueden interactuar en México”, dijo.
“Creo que la reforma educativa no es nada secundaria. Es una reforma muy importante porque en un país con tantos jóvenes, esos jóvenes son los que van a determinar el éxito o el fracaso de México en el futuro. Entonces es una reforma que aplaudimos mucho”, señaló por su parte Alberico Peyron.