ESTOCOLMO. Los Premios Nobel, que este año han galardonado a los “padres” del boson de Higgs, una partícula tan popular como desconocida, o a la novelista Alice Munro, celebran mañana su primer acto de gala con la Lectura del Nobel de Literatura.
La entrega de los Premios Nobel se realizará, como cada año, el 10 de diciembre, cuando falleció su creador, Alfred Nobel (1833-1896), en una ceremonia de gala presidida por los reyes Carlos Gustavo y Silvia de Suecia, con la asistencia de la familia real.
La lectura, mañana, del Nobel de Literatura que este año es la escritora canadiense Alice Munro, premiada como “maestra del relato corto contemporáneo”, será el primer acto en el que Estocolmo se vista de largo en la llamada Semana de los Nobel.
Pero, Munro, de 82 años y residente en Canadá, no viajara a Estocolmo, “simplemente, su salud no se lo permite”, señaló el secretario permanente de la Academia, Peter Englund, aunque estará representada por su hija Jenny Munro.
La tradicional lectura será sustituida por una conversación grabada en vídeo con la laureada bajo el título de “Alice Munro: en sus propias palabras”.
Estocolmo echará de menos, sin duda, la presencia de Munro, decimotercera mujer ganadora del Nobel de Literatura y la única galardonada este año.
Sus relatos cortos se caracterizan por su claridad y realismo psicológico. Historias de vidas cotidianas en pequeñas ciudades, de mujeres de apariencia apacible, pero que esconden sentimientos y emociones secretas.
Otro de los Nobel que este año ha acaparado la atención del público es el de Física, que ha premiado al estadounidense Peter Higss y al belga François Englert por “su descubrimiento teórico de un mecanismo que contribuye a nuestro entendimiento del origen de las partículas subatómica con masa”.
Pocos serían capaces de explicar los detalle del premio, pero muchos son los que han oído hablar del boson de Higgs, también bautizado como la “partícula de Dios”.
Los premiados formularon su teoría hace casi 50 años pero hasta 2012 no se demostró que el boson de Higss era una realidad. El descubrimiento se hizo en el Centro Europeo de Física de Partículas (CERN), que trabajaba en ello desde 1984.
Ambos científicos, que este año han recibido también el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica, teorizaron, junto al ya fallecido Robert Brout, la existencia del boson.
La confirmación de la existencia de esta partícula ha sido considerada un hallazgo esencial en la comprensión del Universo, porque permite asomarse a la observación de lo que ocurrió justo después del “Big Bang”.
Horas antes de que comience en Estocolmo la ceremonia de entrega de los premios, el día 10, estos viajarán hasta Oslo, para entregar el Nobel de la Paz a la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) por sus “amplios esfuerzos para eliminar” estos arsenales.
El Premio Nobel de Economía también es de gran actualidad, pues ha distinguido el “análisis empírico de los precios de los activos” realizado por Eugene Fama, Lars Peter Hansen y Robert Shiller.
Estos economistas han desarrollado nuevos métodos para el estudio de los precios de los activos financieros, que se han convertido en herramientas en la investigación académica y en guía para la práctica inversora.
James E. Rothman, Randy W. Schekman y Thomas C. Südhof son los galardonados con el Nobel de Medicina por “sus descubrimientos de la maquinaria que regula el tráfico vesicular, un sistema de transporte esencial en nuestras células”.
Los tres han resuelto “el misterio de cómo la célula organiza su sistema de transporte” interno y han detallado “los principios moleculares” que explican por qué este sistema es capaz de entregar las moléculas precisas “en el lugar adecuado, en el momento adecuado”, según el Instituto Karolinska de Estocolmo.
El desarrollo de modelos informáticos que permiten entender y predecir procesos químicos complejos le ha valido a Michael Levitt, Martin Karplus y Arie Warshel el Nobel de Química.
Gracias a esos modelos computerizados los científicos pueden hoy en día, por ejemplo, optimizar el funcionamiento de las placas solares y el de los catalizadores en vehículos a motor y elaborar mejores medicamentos.
Todos los galardonados recibirán un diploma, una medalla de oro y una dotación económica que este año será de 8 millones de coronas suecas (922.000 euros, 1,3 millones de dólares), cantidad que se reparte si hay más de un ganador en la misma categoría.
La Semana de los Nobel tendrá también un espacio para la música con el tradicional concierto que se celebra el 8 de diciembre y en el que Riccardo Muti dirigirá a la Real Orquesta Filarmónica de Estocolmo.