“Si me fuera a casar, me encantaría hacerlo en España, hay escenarios espectaculares para hacer una gran boda”, aseguró el cantante Ricky Martin ante su nueva visita a España, país en el que solicitó la nacionalidad y en el cual está legalizado el matrimonio homosexual.

 

Cuando Ricky Martin obtuvo la nacionalidad española hace dos años, se especuló que esta medida era el primer paso para una boda inminente con su novio Carlos González, un rumor que cayó en saco roto con el paso de los meses y que él negó expresamente en todas las entrevistas.

 

Para él, su solicitud al Gobierno español fue “una cuestión de identidad”, a pesar de tener muy claro que sus raíces están en Puerto Rico así como su futuro, al menos hasta que sus hijos también tengan formada esa parte de su identidad cultural.

 

Este año se estrenó como “coach” en la versión australiana del programa de televisión “La voz”, experiencia que califica de fascinante y en la que se vio, dice, su innegable instinto competitivo.

 

“Trabajé con jóvenes artistas que me ayudaron a volver a mis comienzos, a aquellas emociones de incertidumbre”, destaca, hasta el punto de afirmar que, si le ofreciesen repetir ese papel en la versión española, que previsiblemente cambiará de jueces en su tercera edición, “lo analizaría”.