ARGENTINA. En medio de una fuerte ola de calor, miles de vecinos de Buenos Aires y sus alrededores sufrían el martes cortes de luz en sus domicilios, problema del que el gobierno responsabilizó a las distribuidoras de energía y admitió que volverá a repetirse.
Las compañías distribuidoras “deben invertir” para “garantizar el suministro” a los consumidores, dijo en una rueda de prensa el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich. El funcionario admitió que “cuando la temperatura supera los 32 grados (centígrados) promedio” durante varios días consecutivos, el “sistema (eléctrico) entra en tensión” y colapsa.
Desde el viernes las temperaturas han superado los 35 grados en Buenos Aires y sus alrededores. La víspera se incrementaron los cortes de luz y de agua por varias horas en al menos una docena de barrios de la capital y en algunos municipios del conurbano y los vecinos lo han denunciado a través de las redes sociales, señalaron medios de prensa. Los vecinos protestaron bloqueando de algunas calles.
Según Capitanich, el Estado propició que “en los últimos diez años” el sistema energético creciera en “10.000 megavatios de inversión”. “Pero el ritmo de la demanda crece, por el crecimiento industrial y el del consumo domiciliario”, además de las mejoras económicas de la última década, dijo el funcionario.
Capitanich dijo que están previstas “medidas sancionatorias” y que el Ente Regulador de la Electricidad deberá analizar “por qué se produjeron las fallas”. Las distribuidoras no dieron a conocer públicamente su postura. The Associated Press intentó comunicarse con las mismas sin éxito.
Analistas atribuyeron los cortes de luz a una mezcla la falta de inversión de las empresas y falta de planificación estatal en el sector energético, fuertemente subsidiado y donde las tarifas están congeladas desde hace años.
“La demanda ha crecido por encima de la oferta; si no se actualizan las tarifas, las empresas no hacen inversiones; el gobierno debería garantizar la rentabilidad del negocio y falta planificación estatal, aunque las distribuidoras también deben tener el sistema en perfectas condiciones”, dijo a The Associated Press Eduardo Fernández, consultor y ex director de Combustibles en la Secretaría de Energía.
Opositores dijeron en tanto que los últimos años el gobierno nacional no ha desarrollado suficientemente la producción de energía eléctrica.
Por otro lado, el Ministerio de Planificación consideró en un comunicado que no es un caso “excepcional” sino un “mecanismo de cooperación habitual” que Uruguay le haya vendido a Argentina unos 500 megavatios para que el lunes pudiera atender el aumento del consumo eléctrico, tal como reportaron medios de prensa del país vecino.
El Ministerio de Planificación señaló que la demanda la víspera “estableció un nuevo récord para día hábil de 23.334 megavatios a las 15.00” horas (1800 GMT). Argentina “abastece diariamente de gas natural a Uruguay para uso domiciliario mientras que recibe a cambio energía eléctrica de origen térmico cuando existen picos de consumo”, explicó la cartera.
El ministro de Planificación, Julio De Vido, reconoció el lunes que podrían incrementarse este verano los cortes de energía eléctrica por “un mayor consumo”.
El ex secretario de Energía, Jorge Lapeña, dijo a la radio La Once Diez que atribuir el problema al crecimiento de la demanda, “es sacarse la culpa de encima, es una función indelegable de los gobiernos”.
En cuanto al sistema de distribución de energía, Lapeña señaló que en este punto “se supone que el sistema se está renovando en forma permanente, el tema es ver si se están haciendo las inversiones”.