El secretario general del PRD, Alejandro Sánchez Camacho, afirmó que este instituto político está abierto a la negociación y diálogo con las distintas fuerzas, aunque descartó la posibilidad de regresar al Pacto por México.
En conferencia de prensa, reiteró que para el Partido de la Revolución Democrática (PRD) este instrumento «está muerto», por considerar que no es un espacio de negociación que dé confianza y certidumbre para recorrer la ruta de una agenda nacional.
«Esto no significa que el PRD renuncie a la necesaria negociación y diálogo político que tiene que existir entre las partes, pero nunca más un diálogo clandestino, debe ser una negociación y diálogo de cara a la nación, con una agenda compartida, socializada, sobre todo en el parlamento e institutos políticos», apuntó.
El líder perredista también se refirió a la consulta popular e informó que su partido decidió abrir «un compás de espera» para dar el debate y continuar la movilización popular a fin de que de febrero a abril del próximo año haya una mejor expectativa.
Afirmó que no renunciarán a su derecho de promover este ejercicio en el tema de la reforma energética, frente a los señalamientos de los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Acción Nacional (PAN) en el sentido de que no se puede aplicar en temas constitucionales.
«No vamos a renunciar a lo que establece el Artículo 35 Constitucional para garantizar el ejercicio de este derecho ciudadano y ninguna ley reglamentaria está sobre nuestra Carta Magna, así podemos afirmar que la consulta popular si es posible para 2015», sostuvo.
En ese tenor recalcó que en el tema de la elaboración de las leyes reglamentarias de la reforma energética, el PRD «dará la batalla» en las calles y en el Congreso de la Unión, y estará atento para evitar que el PRI y el PAN incluyan «letras chiquitas» para beneficiar a inversionistas privados.
Sánchez Camacho también se refirió a la movilización del 31 de enero que preparan integrantes del Plan por la Unidad en Defensa de la Soberanía Nacional y los Recursos Energéticos, y confió que el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y otras organizaciones reflexionen sobre su participación.
Dijo que un tema importante en la agenda del PRD para el próximo año es continuar la lucha política, jurídica y parlamentaria hasta que se concrete la reforma política del Distrito Federal y que la capital del país cuente con una Constitución propia.
En este marco, aclaró que para el partido del sol azteca la reglamentación de la consulta popular y la propia reforma política del DF no representan «una moneda de cambio» para aprobar las leyes secundarias de la reforma energética.
En otro orden de ideas calificó como un «avasallamiento» hacia el Congreso de la Unión el decreto presidencial por el que se modificaron los términos de la reforma fiscal, y aunque reconoció que la ley le confiere al Ejecutivo esa facultad dijo que analizan si es posible interponer un recurso jurídico en contra de estos cambios.
