ADIS ABEBA. Las facciones en guerra en Sudán del Sur sostuvieron el viernes encuentros preliminares en la vecina Etiopía como preámbulo a las negociaciones formales para resolver el conflicto.
Dina Mufti, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Etiopía, dijo que los encuentros preliminares, realizados en el Hotel Sheraton de Adis Abeba, son necesarios para resolver algunas discrepancias antes de las negociaciones que comenzarán el sábado.
Entretanto continuaban los combates en Sudán del Sur, el país más nuevo del mundo, por lo que Estados Unidos advirtió que estaba reduciendo el personal en su embajada en Yuba, la capital, debido “al deterioro de la situación de seguridad”. El viernes se realizará un vuelo para evacuar a los empleados, informó el Departamento de Estado en un comunicado.
El gobierno de Sudán del Sur ha declarado un estado de emergencia en Unity y Jonglei, dos estados cuyas capitales se encuentran bajo el control de los rebeldes. El jueves, el gobierno central advirtió que los insurgentes leales al destituido vicepresidente Riek Machar se disponían a marchar de Yuba a Bor, la capital del estado de Jonglei que ha sido escenario de cruentos combates entre fuerzas oficialistas y rebeldes.
Las fuerzas armadas de Sudán del Sur dijeron el jueves que habían enviado refuerzos a Bor, a 120 kilómetros (75 millas) de Yuba.
Al sur de Bor, miles de familias han estado huyendo a Awerial, una región cercana al río Nilo. Muchas familias están buscando refugio bajo la sombra de árboles. Grupos de ayuda humanitaria estiman que decenas de miles de personas — quizás entre 60.000 y 75.000 — han huido de Bor tratando de eludir a los combatientes Lou Nuer, apodados “el Ejército Blanco”, que son leales a Machar.
El presidente Salva Kiir sostiene que el conflicto comenzó con el intento golpista lanzado por soldados leales a Machar el 15 de diciembre. Sin embargo, otros funcionarios dicen que la lucha se desató cuando guardias presidenciales del grupo étnico de Kiir, los dinka, trataron de desarmar a los soldados leales a Machar, del grupo étnico nuer. De ahí se esparció la violencia por todo el país.
Sudán del Sur ha estado desgarrado por conflictos étnicos y por pugnas internas del partido en el poder desde que Kiir destituyó a Machar como vicepresidente en julio.
Sudán del Sur se escindió pacíficamente de Sudán en el 2011 tras un acuerdo de paz logrado en el 2005. Antes de eso, durante décadas, el sector sur libró una guerra contra Sudán.