Hace unos días, Melissa era sólo La Princesa de la Banda y a Enrique lo conocían en el ambiente grupero como El Kike; ahora, en medios y redes sociales les denominaron los narcocantantes, porque su padre aparentemente es Enrique Plancarte Solís, uno de los más importantes líderes de Los Caballeros Templarios.
Los encargados de poner en evidencia y difundir los vínculos familiares con el capo fueron los grupos de autodefensa, quienes ingresaron a una de las casas abandonadas por Plancarte en Apatzingán y la abrieron a los medios de comunicación. Al mismo tiempo, colocaron en la red fotografías y direcciones electrónicas con videos y nombres de sus tres hijos: Melissa, Enrique y Jazeth, todos Plancarte Bustos, y los tres cantantes conocidos en Michoacán, y quienes muestran la riqueza de su familia en casas, ranchos, autos y animales, y hasta el orgullo templario con la supuesta vestimenta con la cruz roja del cártel.
Así, la confrontación directa y con armas, entre los grupos de autodefensas y Los Caballeros Templarios escaló a algo parecido a una guerra de información, utilizando como herramienta los medios y las redes sociales e involucrando a las familias de los narcotraficantes.
Una táctica que el cártel empleó desde 2004, con volantes, con el uso de folletos, videos, entrevistas en medios de comunicación y hasta desplegados en periódicos, para hacer creer a la población, primero como La Familia Michoacana y luego como Los Templarios, que cuidaban a la sociedad y no cometían secuestros ni extorsiones.
Ahora las autodefensas exhiben al público la riqueza de los líderes del cártel, con sus casas con grandes jardines y albercas, muebles y zapatos de diseñador, estatuas templarias y un depósito de armas largas.
También exhibieron a los supuestos hijos de Servando Gómez, La Tuta, líder templario: los hermanos Sayonara y Húber Gómez, quienes en distintas fotos posan junto a la cantante Jenny Rivera, quien murió en diciembre de 2012.
Su sueño era cantar con Belinda
En realidad los hijos de Plancarte ya eran famosos. Un recorrido por internet muestra que las familias de ambos narcotraficantes se exhibían como personas de la sociedad michoacana en las páginas de diarios y en revistas, online e impresos.
Melissa Plancarte Bustos, por ejemplo, entrenaba fisicoculturismo y ganó varios premios, uno de ellos fue en 2006, el primer lugar juvenil a los 22 años. Y cinco años más tarde incursionó como cantante de banda, balada y hasta ranchera.
Sus dos hermanos, Enrique y Jazeth, también cantantes del mismo ritmo, también despegaban en su carrera de cantantes. El Kike, por ejemplo, cantó a dueto en vivo con su amigo Espinoza Paz.
En 2010, Melissa fue la cantante principal en Apatzingán en los festejos del Bicentenario de la Independencia, a donde acudieron funcionarios estatales y municipales, y congregó a la comunidad. Aparecían en revistas musicales y daban conciertos en Michoacán, Guanajuato y, de acuerdo a la propia Melissa, se apuntalaban en Estados Unidos.
La Princesa de la Banda y su hermano, ya estaban muy metidos en el ambiente grupero e interactuando con bandas como La Arrolladora Banda el Limón y El Recodo.
Y su fama ya rosaba las publicaciones más importantes de espectáculos. El año pasado fueron entrevistados por TV Notas, con un amplio despliegue de fotografías. A Melissa, a quien denominaron como La Barbie Grupera, contó que era estadunidense pero con raíces michoacanas y que en su casa tenía como mascota a tres tigres. Su hermano, El Kike, de quien decían en la revistas “se abría camino en el mundo de la música”, relataba que comenzó a cantar porque sus dos hermanas mayores lo hacían y que su sueño era compartir escenario con Belinda.
Ya con un disco en la mano, Melissa lanzó por un canal de You Tube de su propia empresa familiar, PlanRecords Entertainment, sus videos promocionales en los que se muestra un despliegue de recursos para las tomas, utilizando helicópteros, autos de lujo, caballos pura sangre y actores de reparto. En uno de los videos aparece un rancho en la zona de tierra caliente de Michoacán que fue cateado y asegurado en 2012 por el Ejército, donde encontraron armas y documentos de Los Templarios.
Pero Melissa siguió en su carrera y hasta recibió un reconocimiento el año pasado en el Distrito Federal, por su música, el evento fue en Galería Plaza de las Estrellas.
Hasta ahora, ninguno de los tres cantantes, hasta ahora, tiene en su contra alguna orden de aprehensión o averiguación previa, las acusaciones hasta ahora sólo son contra su padre Enrique Plancarte Solís, a quien la Procuraduría General de la República (PGR) todavía no ha incautado las propiedades mostradas por los autodefensas.