EDINBURG. Un fiscal del sur de Texas busca confiscar más de 3.2 millones de dólares incautados de cuentas en Estados Unidos pertenecientes a un juez federal mexicano y su esposa.

 

El fiscal de distrito del condado de Hidalgo, René Guerra, dijo que los fondos son el resultado de lavado de dinero y sobornos.

 

Guerra dijo el miércoles que Luis Armando Jerezano Treviño ha impugnado la incautación de enero de 2012 en McAllen. No se han presentado cargos penales, pero los registros indican una investigación del Departamento de Justicia de Estados Unidos.

 

Según documentos judiciales, Jerezano Treviño y su esposa Claudia Zulema Alanís Treviño no informaron a los funcionarios del banco que Jerezano Treviño era un juez mexicano. Los fiscales alegan que depositaron sobornos que Jerezano Treviño tomó mientras ejercía a cambio de fallos favorables.

 

Funcionarios judiciales mexicanos dijeron que Jerezano Treviño había sido suspendido previamente a la espera de un proceso disciplinario.

 

Su abogado no ha respondido a las llamadas en busca de comentarios.

 

En días pasados diputados de México aseguraron que la Procuraduría General de la República (PGR) debe investigar a Jerezano Treviño.

 

Al respecto, los coordinadores del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Manlio Fabio Beltrones y Luis Alberto Villarreal, del Partido Acción Nacional (PAN), se pronunciaron por investigar y, de ser necesario sancionar al juez mexicano que investiga la DEA.

 

Consultado por la prensa, Beltrones Rivera se pronunció porque se aplique la justicia en el caso e indicó que todos aquéllos que infringen la ley, deben ser sometidos por ella, ya sea aquí o en otro lugar, señaló el diputado tricolor en un comunicado.