BUENOS AIRES. Al menos nueve bomberos y miembros de la defensa civil fallecieron el miércoles al derrumbarse parte de un depósito de gestión y almacenaje de documentos perteneciente a la empresa estadounidense Iron Mountain que se incendió en Buenos Aires por causas que aún se desconocen.
Sergio Berni, secretario de seguridad argentino, dijo a los periodistas que además de las nueve víctimas – seis bomberos de la policía federal, un bombero voluntario y dos miembros de defensa civil- siete personas que combatían las llamas sufrieron heridas “de consideración”. El funcionario dijo que cuando los bomberos empezaron las tareas de extinción del fuego una mampostería del depósito se derrumbó.
Las llamas se extendieron en horas tempranas del día en el gran inmueble de una sola planta que pertenece a la empresa estadounidense Iron Mountain, con sede en Boston, que en su página web señala que ofrece entre otros servicios “soluciones integradas para los servicios financieros, como la gestión de archivos bancarios, archivos de crédito, tarjetas de firmas, archivos de cuentas comerciales, archivos de recursos humanos, archivos de hipotecas y pagarés”. La compañía también gestiona y guarda información de organismos públicos y centros médicos.
La empresa dijo en un comunicado que “investigará la causa del incendio” y trabajará estrechamente con los investigadores argentinos “para comprender lo que pasó”. La compañía indicó que el deposito siniestrado estaba equipado con un “sistema de detección de incendios” y otro de con “rociadores” para apagar las llamas.
“Reconocemos que nuestros clientes tendrán preocupaciones y preguntas y estamos contactando a los que han sido afectados” por el hecho, señaló el comunicado, que además indicó que irá proveyendo información a medida que esté disponible.
El gobierno argentino decretó dos días de duelo nacional. “Estamos profundamente dolidos y consternados”, dijo el jefe de gabinete, Jorge Capitanich, al anunciar la medida en una rueda de prensa.
“Fue un derrumbe muy grande que tomó por sorpresa a toda una dotación (de bomberos)”, señaló por su parte Berni, quien puntualizó que, aunque en un principio se temía que cuatro miembros de una brigada antincendios de la empresa estuvieran desaparecidos entre los escombros, lograron salvarse ya que “por la magnitud del incendio se dispersaron”.
Berni señaló que el sistema contraincendios de la empresa es “excelente”, aunque hay que ver si “estaba funcionando electrónicamente bien”, lo que tendrá que ser determinado por los peritos. Al respecto indicó que la justicia determinará cómo se originó el fuego.
Autoridades de la ciudad de Buenos Aires señalaron que el gran galpón contiene documentación bancaria.
Un depósito de la empresa en Londres fue destruido en 2006 por un incendio y otro fue pasto de las llamas en New Jersey (EU) en 1997. Según investigadores, el fuego fue provocado en ambos casos de forma intencional. Sendos hechos generaron demandas contra la empresa por la documentación perdida.
El depósito siniestrado en Buenos Aires está situado en una zona de la capital donde están instaladas distintas fábricas. Según dijeron testigos a medios de prensa, los bomberos estaban intentando abrir una puerta con una amoladora para extinguir el fuego cuando se les vino encima una pared. Luego se derrumbaron tres más.
La empresa, que está en Argentina desde 2000 y cuenta con cuatro locales en esta capital, además de contar con sedes en una treintena de países que cuentan con más de 150 mil clientes, señala en su página web que cuenta con un sistema de detección temprana de incendios y también de protección contra los mismos a través de una red hidrante y rociadores automáticos que penden de los techos.