Los hombres que asesinaron a una familia en Petén, Guatemala, el pasado sábado, buscaban al presunto homicida de cuatro campesinos, así lo revelaron las indagatorias de las autoridades. Por lo pronto, el gobierno ha designado seguridad especial para los familiares de las víctimas.
Los investigadores indicaron que el objetivo del comando que asesinó a nueve personas, entre ellas dos niñas, era uno de los hijos Samuel Xal Xo, acusado de matar a cuatro campesinos de la comunidad de El Naranjal, en Alta Verapaz, detalla Prensa Libre.
Este grupo de 20 hombres fuertemente armados irrumpió en la vivienda durante la madrugada y al no encontrar a su objetivo, disparó en contra de la familia.
El alcalde de San Luis, estado de Petén, Sergio Díaz, indicó que pedirán a las autoridades de gobierno la instalación de un destacamento militar en la región, también se implementó seguridad especial a los parientes de las víctimas. En el lugar se encuentran elementos militares y policías de Petén y Cobán.
El ministro de Gobernación, Mauricio López Bonilla, reconoció la falta de coordinación interinstitucional para evitar esos hechos en esta zona considerada de alto riesgo.
Por otro lado, el arzobispo metropolitano, Oscar Vian, aseguró que “es terrible que en Guatemala no se respete la vida”, esta es la segunda masacre en dicha entidad, en mayo de 2011 fueron asesinados 27 campesinos en un ataque atribuido a Los Zetas.
El sacerdote dijo que desde el 2000 advirtió que la zona “se estaba llenando de narcotraficantes” y que no se hizo nada, a pesar de que Petén ya era tierra de nadie. Él fue obispo-vicario de esa zona de 1996 a 2007.