La nueva generación de juguetes sexuales está aquí. La tecnología no sólo ha cambiado la forma en la que se comunican o conviven las personas, también está cambiando la manera en la que se tiene sexo.
Kiiroo Technologies es una compañía de Amsterdam que combinó la interacción en redes sociales con dispositivos tecnológicos, con el fin de que la persona que está del otro lado de la pantalla sienta en tiempo real y con la misma intensidad “el amor del otro”.
La compañía desarrollo un software y productos denominados teledildonics. Los teledildonics son dispositivos habilitados en forma de vagina, para los hombres, y de “dildos”, para mujeres, con sensores que envían una señal mediante internet que reconocerá el “socio” con el que se está conectado.
Pero eso no es todo, la compañía dice que sigue experimentando con los dispositivos y en breve, se podrán sincronizar con las películas de contenido XXX, con el fin de tener una experiencia multisensorial.
Además, Kiiroo está desarrollando una plataforma como red social, en esta, se pueden compartir las experiencias que los usuarios tienen.
Otro de los avances que buscarán, será una alianza con Second Life, el universo virtual de Linden Lab, con el fin de aumentar la participación de estas conexiones digitales y sesiones de uso con una sola mano.
El avance de estos dispositivos de divertimento sexual conectados a internet parecen ser también un paso hacia la realidad virtual, así como (por ejemplo), Virtual Boy de Nintendo, fue el primer paso hacia las imágenes del Oculus Rift.
El sueño de la Novia Robot
La fantasía de una chica robot no es nueva. Existe desde 1927 con Fritz Lang y María en Metrópolis, hasta las discusiones más recientes al interior de la industria pornográfica de Estados Unidos para sustituir a actores mediante máquinas.
“Los aparatos sexuales no son nada nuevo. La realidad es un poco más torpe, pero con Roxxxy, estamos trabajando con Inteligencia Artificial y combinándolo con un cuerpo humano”, dijo Douglas Hines, fundador de True Companion, compañía instalada en Nueva Jersey, especializada en el estudio y aplicación de la robótica.
“La brecha entre lo que es la robótica y la mecánica y lo que es similar a la raza humana minimizará”, dijo durante la presentación de Roxxxy, un robot de compañía en el marco de la Adult Entertainment Expo del 2010.
Antes de fundar True Companion, Douglas Hines trabajó en el laboratorio de inteligencia artificial de AT&T Bell Laboratories.
Roxxxy cuenta, entre otras cosas, con la cualidad de ser personalizable, y con sensores estratégicamente localizados con respuesta al tacto y al movimiento.