Sólo 61 personas, de entre centenares encontradas sin vida en fosas clandestinas de los últimos años, se han identificado con pruebas de ADN practicadas por la Procuraduría General de la República (PGR); esa es la única técnica que garantiza un resultado 100 por ciento confiable, aun cuando los restos estén en mal estado o sean muy antiguos.
Datos oficiales de la dependencia, que 24 HORAS verificó, indican que durante todo el sexenio pasado apenas se corroboraron con esta mecánica la identidad de 42 personas encontradas en las fosas.
En lo que respecta al 2013, la PGR informó públicamente de la identificación con pruebas genéticas de 6 de los más de 60 cuerpos encontrados en las fosas clandestinas de Jalisco, y de los 13 cuerpos hallados en el estado de México que correspondían al caso del Bar Heaven.
“La tecnología existe desde la década de los 80s, en la actualidad los amplificadores genéticos permiten identificar incluso restos óseos de más de mil años de antigüedad. Por qué no se ha hecho más, no lo sé, pero las herramientas han estado ahí”, dijo en entrevista el director de Biotecnología del Tec de Monterrey, Rodrigo Muñoz Soto.
La información de la Procuraduría indica que entre el 2006 y el 2012 la Dirección General de Servicios Periciales de la institución llevó cabo 2 mil 324 estudios de ADN a cuerpos encontrados en fosas clandestinas.
En los casos donde fue posible y los restos lo permitían se realizaron tres estudios genéticos a un solo cuerpo: el de pelo, el de hueso y el de rastro de sangre.
Sin embargo estos estudios pudieron ser comparados sólo con otras 928 muestras que se tenían de referencia de familiares de personas desaparecidas en el sexenio pasado.
El resultado es que hasta el 2012 sólo se lograron identificar con los exámenes genéticos a un total de 42 cuerpos, de los cuales 95% fueron hombres y 5% mujeres.
Respecto al 2013, sólo se informó de la identificación mediante el ADN de los 13 cuerpos hallados en una fosa del Estado de México y que correspondieron a las víctimas secuestradas del Bar Heaven. El trabajo se hizo en conjunto con especialistas de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal.
Tras el hallazgo en noviembre de 67 cuerpos en fosas clandestinas de La Barca Jalisco, la PGR inició la conformación de otro banco de datos genéticos con familiares de personas desaparecidos, que incluyo más de 400 muestras. Pero hasta el cierre del año pasado sólo había 6 víctimas identificadas.
Varios millones, pocos peritos
A través de una solicitud de información pública, la PGR reveló que el costo de los exámenes de ADN que se practicaron a cuerpos encontrados en fosas clandestinas y a familiares de desaparecidos durante el sexenio pasado, superó los 17 millones y medio de pesos.
El costo promedio de cada estudio de ADN practicado a un cuerpo fue de 4 mil pesos, mientras que los exámenes hechos a familiares oscilaron de 2 mil a 2 mil 500 pesos.
A lo anterior se suma el sueldo de los peritos que participaron en la realización de las pruebas y que en promedio invirtieron 10% de su tiempo total de trabajo en estos análisis.
La PGR estableció así que la inversión hecha en pruebas de ADN por cada cuerpo hallado en una fosa clandestina fue de los 22 a 33 mil pesos. En los últimos años se abarató la inversión pues disminuyó el precio de los reactivos.
Los datos oficiales además revelan que para todo este trabajo la PGR empleó un equipo que originalmente era de diez peritos y que tuvo que duplicarse conforme se hizo más grande el nivel de los hallazgos. En el 2012 fueron 22 peritos los que trabajaron en las pruebas de ADN.
Comments are closed.