El nuevo auge del hip hop y del rap, así como de otros ritmos afroantillanos que consagraron a Afrika Bambaataa, the Beastie Boys, LL Cool J y Derrick May provocaron que una caja de ritmos que carecía de una demanda fuerte en la década de los ochentas tuviera una segunda oportunidad.
La TR-808 de la Roland fue lanzada al mercado por primera vez en 1980, pero no tuvo el éxito esperado, ya que sus ritmos como la batería analógica, fueron catalogados poco profesionales, sin embargo, el revival del hip hop y su coronación en el mainstream cambiaron el destino de este instrumento, ya considerado de culto.
Roland, una de las firmas de sintetizadores más famosa del mundo lanzó al mercado una nueva versión de la caja de ritmos, denominada TR-909.
La mayoría de sus sonidos ya fueron digitalizados, la forma es la misma, pero esta versión agrega botones ligth-up y perillas de distorsión, también agregó un nuevo Bass Line y un Voice Transformer.
Esto también fue propiciado por el auge del EDM, ya que a pesar de que la industria no recibió con los brazos abiertos esta caja de ritmos, ésta se convirtió en parte de la banda sonora de una generación.
“La intención de Roland fue tomada por estos grupos que jugaron un papel muy importante en, básicamente, inventar un género”, dijo al respecto Jason Bentley, director musical de KCRW, una estación originaria de Los Ángeles a The Verge.